Kate Middleton apareció públicamente por segunda vez tras conocerse su diagnóstico de cáncer y sorprendió con su look. Se lució en la final de Wimbledon. Llevó un vestido de color lavanda de la marca londinense Safiyaa, de mangas cortas, corte a la cintura y falda levemente evasé, con diseño de frunce en el corsage. Completó su estilismo con accesorios en color nude: stilettos sin talón de la firma Camilla Elphick, más clutch al tono de LK Bennett.
Se mostró radiante y por momentos emocionada hasta las lágrimas en el All England Lawn Tennis Club donde concurró junto a la Princesa Charlotte y su hermana Pippa Middleton.
Según dicen, que la princesa haya elegido vestirse de color lavanda no es casual. Ella que continúa con su tratamiento contra el cáncer quiso lookearse de ese tono para acompañar a quienes están batallando contra una enfermedad. Se sabe que la familia real acostumbra elegir el color de sus looks para comunicar.
Los últimos meses de Kate no han sido nada fáciles. Sin embargo, ella quiere "retomar las cosas donde las dejó" y continuar con sus compromisos y su agenda oficial. Por eso, a medida que se va recuperando, va a ir apareciendo.
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