Consumir tés, sea el que sea, es una forma de desintoxicar el cuerpo. El té es la infusión detox perfecta. Pero si además, lo hacés de cúrcuma y pimienta negra, tendrá efectos muy especiales en tu cuerpo.
Este té es recomendado para las personas que buscan bajar de peso: hidrata, aporta sensación de saciedad y elimina el exceso de líquido, siempre y cuando se acompañe de una dieta saludable y actividad física.
Además, este té es un poderoso antiinflamatorio y antiácido. La cúrcuma es rica en fibra, y se la conoce como “el ibuprofeno natural”, ya que reduce el dolor y la inflamación. Es perfecto para tomar después de las comidas para aligerar la digestión.
Y si todo esto fuera poco, la cúrcuma también frena la aparición de arrugas y manchas en la piel. Por otra parte, la pimienta negra tiene el poder de saciedad, aumenta el gasto de energía, tiene propiedades antibacterianas y ayuda a reducir el colesterol.
Cómo preparar el té de cúrcuma y pimienta negra
- Paso 1: Poné 1 litro de agua a calentar con un trozo de raíz de jengibre.
- Paso 2: Cuando hierva, retirá del fuego y añadí 1 cucharada de cúrcuma en polvo, 1/2 cucharada de pimienta negra molida y 1 palito de canela en rama.
- Paso 3: Dejá que esta mezcla infusione durante 10 minutos.
- Paso 4: Colalo y añadí miel al gusto. También podés incluir un chorrito de jugo de limón o unas rodajas de este cítrico.
Se puede tomar caliente o frío. Algunas investigaciones sugieren que tomar este té por la mañana, pero si lo tomás por la noche, ayuda a relajarse antes de dormir.
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