Está demostrado que la colorimetría personal tiene un impacto positivo no solo en nuestro aspecto, sino también en nuestras emociones.
A continuación te dejo algunas herramientas que usamos los asesores de imagen para identificar la colorimetría de nuestros clientes y potenciar su imagen.
1-¿Paleta fría o cálida?
Lo primero que tenemos que identificar es si pertenecemos a una paleta cálida o fría. Para ello podemos observar las características de nuestro tono de piel, pelo y ojos.
Tenemos que observar cómo reacciona nuestra piel cuando nos exponemos al sol:
-Si se enrojece con facilidad y luego vuelve a estar blanca, seguramente pertenecemos a la paleta fría.
-Si, en cambio, nos bronceamos con facilidad y tomamos un color dorado, entonces somos de paleta cálida.
Otra alternativa, es observar nuestro tono de cabello y ojos:
-Para quienes tienen un tono dorado o cobrizo en el pelo (ya sean rubias o castañas) y ojos en las gamas de verdes, marrones o miel, suelen pertenecer a las paletas cálidas.
-Mientras quienes tienen tonos de cabello ceniza, rubios platinados, castaños oscuros sin reflejos o negro y ojos en tonos fríos, como celestes, azules, grises, verdes puros o negros, por lo general corresponden a la paleta fría.
2- Los colores ideales para cada paleta
Esto significa que hay colores que, dependiendo de la paleta a la que pertenecés, te favorecen más que otros.
-A la paleta cálida le sientan mejor los colores amarillos mostaza, rosa viejo, naranjas, beige, terracota, verde musgo o militar, marrones, azul marino, turquesa, rojo bermellón, y los metalizados dorados o cobrizos.
-A la paleta fría le quedan mejor los tonos como los violetas, verde agua, verde botella, azul Francia, azul Klein, lila, tonos pasteles, burgundy, rojo puro, fucsia y metalizados plateados.
3- Cómo usar los colores
Lo importante es que uses cerca del rostro los colores que más te favorecen: en blusas, remeras, bufandas, chalinas, collares y aros, para que iluminen y te aporten un "efecto filtro".
¿Cómo te beneficia usar tus colores ideales? Vas a notar que al usar los colores que son de tu paleta, tus facciones resaltan, tu piel se ve más uniforme, sin imperfecciones. Tus dientes parecen más blancos y se desdibujan manchas y ojeras.
Por el contrario, cuando lucimos colores que no están en nuestra colorimetría, la piel parece apagada, se destacan manchas, ojeras y tenemos un aspecto desmejorado.
Fuente: Julieta Bregliano, Asesora de Imagen y Productora de Moda / @brejel.imagen
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