Si hay algo que está arrasando en el mundo del diseño de interiores, son las bañeras exentas. Esta pieza elegante tiene el poder de transformar cualquier baño en una especie de spa de lujo.
Acá te contamos por qué se convirtieron en el nuevo must de los baños modernos + todo lo que tenés que saber antes de incorporar una.
Bañeras exentas: por qué son tendencia
Las bañeras exentas llegaron para darle un giro radical a los baños tradicionales. Este estilo se caracteriza por su diseño independiente, es decir, no está integrada en una pared o espacio fijo.
De esta forma, se convierten en el centro de atención de cualquier cuarto de baño.
El gran boom de las bañeras exentas viene de la mano de una tendencia más grande: crear baños con alma de spa.
Pero además de ser un objeto decorativo impresionante y transformar la atmósfera de todo el baño, son cómodas, funcionales y velan por el bienestar. Y es que hay que admitirlo: ¿quién no soñó alguna vez con sumergirse en una bañadera de este estilo repleta de espuma con velas aromáticas y música relajante de fondo?
Muchas marcas de diseño supieron aprovechar esta tendencia incorporando materiales innovadores como piedra natural, acrílico o incluso cobre, lo que eleva aún más la estética del baño.
Las formas modernas, desde las más curvas hasta las más minimalistas, pueden adaptarse a cualquier estilo: desde lo clásico y elegante hasta lo más vanguardista y jugado.
Los pros de una bañera exenta
- Estilo: son simplemente irresistibles, imponentes y elegantes con ese toque de glamour que te hace sentir en el baño de un hotel de lujo.
- Crea un ambiente relajante: son ideales para quienes buscan un baño con alma de spa. Permiten disfrutar de un baño largo y reparador, lejos del estrés del día a día.
- Versatilidad: se adaptan a casi cualquier tipo de espacio. Si bien son perfectas para baños grandes, las más compactas también pueden funcionar en espacios pequeños, siempre que el diseño lo permita.
- Fácil de limpiar: a diferencia de las bañeras incrustadas, las exentas no tienen esos rincones difíciles de alcanzar. Su forma independiente facilita la limpieza.
Los contras de una bañera exenta
- Precio elevado: no vamos a mentir, tener una bañera exenta en casa puede ser una inversión considerable. Además del costo, a veces también implica gastos adicionales en la instalación.
- Espacio necesario: este tipo de bañeras requieren de un baño con espacio suficiente para destacarse. Si tu baño es pequeño, quizás no sea la mejor opción.
- Requiere más mantenimiento: como la bañera está expuesta, es más propensa a acumular polvo o agua que, si no se seca correctamente, puede causar manchas.
- Instalación especializada: a veces la instalación de este tipo de bañeras no es tan simple como las tradicionales, lo que también puede aumentar el costo final.
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