Es de la familia de las suculentas, por lo que sus hojas son bien carnosas y contienen en su interior un gel que puede usarse para resolver varios problemas de la piel.
- Su poder hidratante previene la piel agrietada, reseca y las estrías.
- Es desinflamante, por lo que se puede aplicar sobre pieles acneicas o enrojecidas.
- Resulta ideal aplicarlo después de la o el afeitado.
- Regenera la piel afectada por quemaduras o irritaciones (por eso los productos post solares lo cuentan como uno de sus ingredientes principales).
- Si se aplica después de la limpieza nocturna, tiene un efecto detox e hidratante para la piel de la cara.
¿Cómo extraer el gel? Cortá una de sus hojas con cuidado, retirale con un cuchillo los laterales (que son escamados y pinchan) y luego hacer un corte a lo largo, de manera tal de dejar al descubierto la pulpa. Extraé el gel natural que brota y aplicalo por la zona en cuestión. Sirve tanto para el rostro como para el cuerpo.
Por tratarse de un producto natural, no genera reacciones adversas, aunque siempre es conveniente hacerse una prueba en una pequeña porción de la piel para observar que no genere efectos no deseados.
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