Después de pasar diez días en la Patagonia argentina, donde vinieron para pasar las fiestas, el 1º de enero Wanda Nara y su familia emprendieron el regreso a Europa, ya que Mauro tiene que reintegrarse a su trabajo en el equipo de futbol PSG de París.
Con lágrimas, la esposa de Mauro Icardi filmó el momento ya subida en la combi que los trasladó al aeropuerto, mientras Zaira, con Viggo en brazos, la despedía llorando.
Los chicos tampoco querían despedirse de sus primos. Malaika von Plessen fue la más apenada por la partida de Francesca e Isabella Icardi, las pequeñas hijas de Wanda.
Evidentemente, pasar la Navidad y fin de año en familia, unió más aún a las hermanas Nara y a sus hijos, que disfrutaron de San Martín de los Andes y sus bellezas naturales.
La que no la pasó tan bien es Nora Colosimo, la mamá de las hermanas Nara, que en plena estadía en el sur con sus hijas sufrió un accidente doméstico y se fracturó el brazo derecho.
Sin embargo, el incidente no opacó la alegría de tener a toda la familia reunida para pasar las fiestas.
Desde su llegada a la Patagonia, Wanda, Mauro y sus cinco hijos, Valentino, Constantino, Benedicto, Francesca e Isabella, practicaron glamping en una espectacular carpa a puro lujo instalada en la propiedad de Zaira y Jacko Von Plessen. Sin embargo, con el correr de los días, los chicos prefirieron dormir en la cabaña contigua con sus primos -Malaika y Viggo- y con sus tíos, lo que permitió a Wanda y a Mauro disfrutar a solas de las instalaciones de la carpa.
Las dos familias disfrutaron del paisaje a más no poder. Mientras Mauro y Jacko se encargaron de hacer espectacular asados, Zaira y Wanda cabalgaron a la orilla de los ríos y los chicos jugaron en la naturaleza.
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