El año pasado, el diseñador aprovechó la cuarentena para poner a nuevo su hogar y comenzar una nueva etapa. "Esta es mi casa ahora", dice mientras nos invita a recorrer su departamento en planta baja ¡recién renovado!
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"Es un departamento racionalista que lo reformó Julio Oropel", cuenta. Ni bien se ingresa, sorprende "Con una pared toda hecha con piezas de una antigua imprenta", según comenta él mismo.
"Tengo pinturas por todas partes. Me gusta un poco de todo, clásicos y modernos. Acá vas a ver desde un Quinquela Martin, un Rodrigo Suárez y un Milo Lockett a un Marta Minujín. Algunos cuadros heredados de mi madre (como el Fader), otros comprados -cuenta Benito- Recién ahora logré encontrarles su puesto en las paredes. ¡Mirá que lindos cuadros tengo!, son lo único que coleccioné toda mi vida y me gusta variarlos y cambiarlos de lugar", expresa.
Para el comedor, eligió "una amplia mesa de madera. Me gusta recibir y pasar mucho tiempo con amigos y hacerlos sentir en casa", comentó Benito.
"La mesa ya la tenía, solo que ahora la lustré y le pinté las patas de negro. Encima tiene la araña".
El departamento de Benito es un mix de estilos: tiene "una biblioteca de acrílico de los años '70 la compré ahora en un remate de Verga Hermanos, y otra con espíritu industrial", señala Benito.
El diseñador compra mucho en remates online. "Me gusta comprar cosas ahí y en los remates de Antigüedades en Argentina. ¡Encuentro cada cosa! Como mis juegos de platos, divinos e importados a mejor precio que muchos de supermercado", asegura.
Adora los livings y por eso tiene dos: "tengo dos livings, los dos (como toda la casa ahora) ambientados en gris. Mi perro José Antonio tiene permitido subirse. A uno lo ambienté con un mural de flores de Sofía Willimö".
El oasis de Benito
Benito Fernández le incorporó mesitas de luz de Eugenio Aguirre. Mandó a pintar un cuadro de Yaz Cohen, "¡que es una bomba! De 2 x 70 m.", detalla el diseñador.
Al fondo de la casa, está en gran refugio: "el jardín con la pileta y el deck que acabo de mandar a hacer con CB Group. Lo uso en especial los fines de semana, tiene una linda arboleda y es muy tranquilo. Ahí me desconecto un montón", comenta Benito.
"Además, el jardín tiene la razón por la que me mudé acá".
"Es que en realidad yo vivía acá cerca, en el edificio Los Gansos ,y este departamento lo vino a ver una amiga Maggie. Ella tenía hijos entonces no le servía pero me dijo "andá a verlo, te va a encantar". ¡Yo no tenía ni pensado mudarme de casa!", explica Benito Fernández.
Video y edición: Alejandro Carra
