Una buena alimentación durante los primeros 1000 días es clave para el fortalecimiento del sistema inmune del bebé, su respuesta ante posibles procesos inflamatorios y su desarrollo cerebral, entre otros procesos valiosos de esa etapa.
La leche materna es, indiscutiblemente, el mejor alimento para los bebés, ya que cada gota contiene miles de componentes que actúan juntos de manera sinérgica para favorecer su crecimiento y desarrollo.
Los principales son agua, lactosa, grasa y más de 200 oligosacáridos conocidos, a los que se suman otras sustancias en menor cantidad, pero claves para la salud y nutrición del bebé, como los como los prebióticos y postbióticos.
Los prebióticos son hidratos de carbono no digeribles que nutren a los microorganismos del intestino del bebé y favorecen el crecimiento de bacterias beneficiosas como las bifidobacterias y los lactobacilos.
Los postbióticos producidos por los microorganismos intestinales saludables o ¨buenos¨, son claves para la inmunidad y evitar enfermedades como las infecciones.
Los oligosacáridos de leche humana o Human Milk Oligosacharides (HMOs) juegan una función clave durante el desarrollo ya que tienen múltiples beneficios para los niños. Además, mejoran el perfil bacteriano intestinal, lo que ayuda a tener un sistema inmune más fuerte ante posibles enfermedades infecciosas.
Luego de más de 40 años de investigar la leche materna, se logró replicar tres de sus componentes clave en el entrenamiento del sistema inmune: prebióticos, postbióticos y el HMO (un oligosacárido presente en la leche humana).
La nueva fórmula NUTRILON PROFUTURA 4 suma a su mix exclusivo de PREBIÓTICOS GOS/FOS (9:1), POSTBIÓTICOS y 3GL, un HMO con función antiinflamatoria. Estos nuevos ingredientes poseen efectos biológicos sobre la respuesta inmunológica. La combinación de prebióticos, postbióticos y HMO (3GL) junto a LCPs y Vitaminas A, C y D, convierten a Nutrilon Profutura 4 en una leche infantil única en el mercado.