Según un estudio global de Ipsos, el 78 por ciento de las mujeres del mundo atravesamos situaciones de acoso en espacios públicos. Desde miradas obscenas, gestos ofensivos, roces "accidentales" y comentarios sexuales, hasta persecuciones, exhibicionismo y humillaciones públicas. Las mujeres pasamos por alguna de estas o innumerables situaciones más y, la peor parte: nos sentimos inseguras en la vía pública y vemos limitada nuestra autonomía cada día que salimos a la calle.
¿Cuántas veces viste a una mujer siendo acosada en la vía pública y te sentiste impotente por no poder hacer nada? Todo el tiempo somos testigos de acoso callejero y en cualquier ámbito. Muchas veces eso nos incomoda, y miramos para otro lado. Aunque no estemos de acuerdo, lo “aceptamos”, lo naturalizamos. O queremos hacer algo pero no sabemos cómo actuar, tenemos miedo y no nos animamos a intervenir.
Desde Para Ti, le preguntamos a nuestras usuarias si habían sufrido alguna situación así y nos sorprendimos, con tristeza, de la cantidad de comentarios, reacciones y mensajes que recibimos. Te compartimos las respuestas:
Pero podemos hacer algo. Podemos comprometernos para ponerle fin. Podemos darle visibilidad, hablarlo, desnaturalizarlo y actuar para detener las situaciones de acoso callejero. De eso se trata la campaña Stand Up, una iniciativa de la fundación internacional Hollaback! y L’Oréal Paris, que se unieron para visibilizar esta modalidad de violencia de género, que es tan habitual y está tan naturalizada, y generar herramientas simples que te pueden ayudar a detener las situaciones de acoso callejero de manera segura. Queremos contarte de qué se tratan esas estrategias, para que vos también puedas incorporarlas y, fundamental, las compartas con todas las personas de tu entorno.
Qué hacer si te pasa a vos
Antes que nada, recordá: no estás sola y lo que te pasa es importante. Que nadie te haga dudar de esto, el acoso callejero está mal y nunca es culpa tuya.
También es valioso que sepas que no tenés que juzgarte por tu reacción ante este tipo de situaciones, no es tu responsabilidad encontrar la reacción adecuada o "perfecta"; es responsabilidad del otro no acosarte. Estas son algunas de las estrategias que podés adoptar cuando te sientas expuesta a una situación de acoso callejero:
- Intentá decirle algo: tratá de decirle a la persona que te está acosando que deje de hacerlo, que se aleje de vos o cuestionale por qué quiere hacerte sentir incómoda. Tratá de mantener la calma, el tono y, lo más importante, tu seguridad.
- Pedí ayuda: si no te sentís cómoda enfrentándote directamente a la persona que te está acosando o te sentís insegura, siempre podés decirle a la gente que está alrededor lo que el acosador dijo o hizo, e identificarlo. Pedile a alguien que esté cerca que se quede unos minutos con vos o que te ayude a llamar a alguna autoridad.
- Grabalo: si te sentís segura, podés sacar una foto o grabar un video sobre lo que está pasando, o pedile a alguien que esté presenciando la situación que lo haga. Consultá los recursos legales para ver cómo podés denunciar el acoso y cómo utilizar tu grabación para la denuncia. En Argentina, siempre podés llamar a la línea 144 de atención, contención y asesoramiento para situaciones de violencia de género, que funciona las 24 horas, de manera gratuita y en todo el país.
Qué hacer cuando lo presenciás
Cuando veas a otra mujer en una situación de acoso callejero, confiá en lo que percibís: si creés que algo no va bien, que no es correcto, probablemente tengas razón.
El 87 por ciento de quienes presenciaron acoso callejero no hizo nada porque no sabía cómo actuar o por miedo a que su intervención empeorara las cosas. Esta metodología fue creada para brindar herramientas concretas de intervención de manera segura, tanto para quien vive la situación de acoso como para quien la presencia como testigo. Se trata de las 5D, cinco herramientas diseñadas por Holloback!, probadas en distintas ciudades del mundo:
- Dar asistencia: hablá con la persona que está atravesando por la situación de acoso. Hacele saber que lo que ocurrió no está bien y que bajo ningún concepto es su culpa. Transmitile que la comprendés y brindale el apoyo que merece.
- Delegar: avisale a alguien que se encuentre cerca sobre lo que está pasando y preguntale si puede hacer algo. También podés pedir ayuda a una persona con autoridad en el espacio donde estés, ya sea la persona que conduce el colectivo, alguien de seguridad, una persona que trabaje en el bar o la policía.
- Documentar: esto puede parecer bastante sencillo, pero antes de prender tu cámara recordá que lo hacés para ayudar a la persona que está siendo acosada. Y lo más importante de todo: consultá siempre con quien atravesó la situación de acoso sobre lo que quiere hacer con el material que documentaste. Nunca publiques algo o lo uses sin su autorización.
- Dirigirse al acosador: interpelá al acosador. Decile que lo que está haciendo no es correcto. Pero no entres en una discusión. Simplemente, pedile que deje tranquila a la persona que está acosando, o hablá con quien está siendo acosada acerca de lo ocurrido. Dirigirse al acosador debe ser el último recurso para evitar que la violencia escale. Tu seguridad y la seguridad de la persona acosada es lo más importante.
- Distraer es una manera indirecta de desviar la atención de lo que está pasando hacia otra cosa. Algunas maneras de distraer: preguntar por un lugar, ponerte en el medio, tirar algo "accidentalmente".
Todas las personas tenemos diferentes maneras de reaccionar ante situaciones que nos ofenden o nos dañan. Es importante que no nos callemos ni finjamos que no ocurrió. Cuanto más nos callamos, más aumentan las dudas y menos posibilidades de enfrentar el acoso. Nuestras palabras y nuestras acciones pueden ayudar a detener el acoso callejero. ¿Nos sumamos todas?