No hay dudas: cuando encontrás una manera de maquillarte simple y práctica, la adoptás para todo momento. Así es esta nueva tendencia que proviene de Europa y que ya es furor por lo simple que resulta ¡y por los resultados!
Se llama 'glowstack' y se caracteriza por buscar una terminación luminosa en la piel a partir de la combinación del maquillaje con un producto de tratamiento, es decir, un serum. Y es tan novedoso que todavía no hay tutoriales en Tik Tok que muestren el paso a paso de cómo hacerlo (que sí te contamos a continuación en esta nota).
Glowstack, el brillo justo de un maquillaje perfecto
Las tendencias cambian todo el tiempo, surgiendo diferentes tipos de texturas y de acabados en el maquillaje. No es novedad el protagonismo del glow, pero este nuevo concepto se diferencia de él. Antes se veían pieles muy jugosas, extrahidratadas, lo que busca el glowstack es bajar esto un poco, optando por una luminosidad aterciopelada y más natural.
La idea es generar el efecto en la piel que parezca que irradia luz desde el interior, mientras es casi imperceptible la base de maquillaje. Una terminación de tez lavada, limpia y descansada.
Esto es posible lograrlo en cualquier tipo de piel (seca, mixta o grasa) siempre que se realicen las adaptaciones necesarias y el tono de base sea el correcto en cada caso.
Paso a paso: recreá el maquillaje glowstack
1- Prepará la piel aplicando un buen sérum por todo el rostro y, si lo notas demasiado seco o deshidratado, añadí sin problema una crema adicional.
2- Después, seleccioná una base de maquillaje de tu tono, con cobertura de media a baja. Extendela correctamente, lo más uniforme posible.
3- Aplicá corrector de ojeras y esfumalo hasta que se funda con la base.
4- Por último, una vez trabajado el cutis, llega el paso esencial: tomá nuevamente el sérum y aplicalo con los dedos dando pequeños toques en pómulos, tabique nasal, corazón del labio y barbilla. Esto lo que va a crear el efecto de luz inmediata.
Un tip fundamental es que los productos seleccionados deben reflejar la luz sin contener partículas brillantes (como el glitter) ni terminaciones metálicos ya que provocan que el resultado sea artificial.
Si tu cutis es graso, podés recurrir a algún polvo matificante en la zona central del rostro que, además, te ayudará a fijar la base de maquillaje antes de usar el sérum a modo de iluminador. Así, la luz que transmitirá tu piel es una luz más natural y no dará aspecto oleoso.
Si tenés una base de alta cobertura podés aligerarla mezclándola con un poco de sérum o crema, aportarás hidratación extra y el resultado será más luminoso.