Recibir los rayos del sol sobre la piel aporta muchos beneficios, ya que brinda vitamina D, así como estar en el mar proporciona oligoelementos y minerales. Sin embargo, los rayos solares pueden ser agresivos con la piel si no se tiene los cuidados adecuados.
Por ello es muy importante tomar ciertos recaudos para prevenir quemaduras de la piel desde el momento antes de acudir a la playa, mientras se disfruta del mar y la arena, y después de exponerse al sol.
Antes de ir a la playa
Antes de salir de tu casa para afrontar un día de playa es esencial llevar en el bolso un bloqueador solar, ya que este producto se encarga de proteger la piel de los rayos solares y así previene daños que podrían desencadenar problemas más serios. Se recomienda aplicar protector solar todos los días, aproximadamente cada 2 o 3 horas, que es el periodo de efectividad con el que suelen contar.
En cuestión de protección solar, lo mejor es optar por un producto con SPF 30 o SPF 50, y aplicarlo tanto en la cara como en todo el cuerpo. De igual manera, utilizá bálsamos labiales con SPF ya que son una gran ayuda para hidratar la delgada piel de tus labios y también protegerlos.
Hay que protegerse de los rayos UV —rayos UVA y rayos UVB— dado que ocasionan daños como quemaduras, envejecimiento de las células de la piel, daño al ADN de las células; y daños a largo plazo como las arrugas e inclusive está relacionado su impacto con el desarrollo de algunas enfermedades más dañinas.
Es muy importante que antes de acudir a la playa, uses una crema hidratante en todo el cuerpo antes del protector solar, para tener otra capa protectora en la piel.
En la playa
Ya estando en la playa, evitá exponerte por largos periodos de tiempo al sol, y en lo posible elegí un área donde haya suficiente sombra cuando los rayos son demasiado fuertes. Si la playa es muy despojada, llevá una sombrilla para cubrirte y darle respiro a tu piel.
Los dermatólogos recomiendan exposiciones menores a 15 minutos bajo el rayo del sol. Por lo mismo es recomendable utilizar sombrero adicional al fotoprotector cuando se está bajo el sol; así como aplicar el protector solar cada dos horas y después de salir del mar.
Las quemaduras de sol pueden provocar insolación y deshidratación, por lo que es muy importante que tomes mucha agua para mantenerte hidratada.
Entre las 12 del día y las 4 de la tarde es mejor que te mantengas alejada del sol, pues son las horas donde se encuentra en su punto más fuerte y por lo tanto quema más, incrementando el riesgo.
Una manera de mantenerse hidratado, además de tomar agua fresca durante el día, es consumir alimentos ricos en vitamina C, como los cítricos (naranja o limón) dado que son refrescantes y son buenos antioxidantes que ayudan a la salud de la piel.
Cuidados post sol
Es muy importante que cuides tu piel posterior a un día de playa o a mucha exposición solar. Para esto podes empezar por tomar una buena ducha con agua fría, dado que después de haber pasado tiempo bajo el sol aumenta la temperatura corporal. De igual manera es importante limpiar la piel, especialmente la de la cara que es más delicada con un limpiador facial.
Después hidratá tu piel con alguna loción especial para repararla de las quemaduras del sol, y se recomienda continuar aplicando crema los días siguientes para mantener la piel hidratada. Para esto existen productos especialmente diseñados y señalados como post solar que tienen componentes que ayudan a dar esa dosis de hidratación que la piel necesita.
También se recomienda exfoliar frecuentemente la piel para remover las células muertas y que la piel luzca radiante. De igual manera, luego de que la piel haya estado expuesta al sol es una gran opción aplicar una mascarilla que ayude a hidratar y exfoliar de manera muy suave.
Para esto, puedes aplicar tratamientos con sal de mar o también preparar algunas mascarillas con ingredientes naturales como palta, avena, aloe vera, miel o huevo.
Qué hacer en caso de quemaduras
Si pasaste demasiado tiempo bajo el rayo del sol, y te quemaste, existen muchos remedios caseros que se pueden aplicar. Si la quemadura es muy intensa podría ser necesario que consultaras con un dermatólogo.
En primera instancia, no se debe aplicar el chorro de agua directamente sobre la piel afectada; es preferible ayudarse de un algodón para limpiar la zona y aplicar alguna loción hidratante o tratamiento. Otro remedio rápido es colocar paños húmedos o compresas frías.
- Aloe Vera
El aloe vera tiene un gran contenido de colágeno, por lo que ayuda a que la piel se regenere. La consistencia fresca de su pulpa alivia rápidamente la comezón y el ardor al aplicarla directamente a la piel, por lo cual es una de las mejores opciones para tratar quemaduras recientes.
- Aceite de Coco
El coco tiene propiedades desinflamatorias, por lo que es un buen remedio para ayudar a curar la piel de las quemaduras solares leves. El aceite de coco ayuda a calmar el enrojecimiento de la piel y la irritación. Este lo puedes aplicar varias veces al día para aliviar el ardor.
- Tomate
El tomate aporta muchos beneficios para ayudarte a tener una piel sana e hidratada; además tiene propiedades cicatrizantes e hidratantes, de hecho, es el vegetal con mayores propiedades humectantes de todos. Puedes rebanarlo o molerlo y poner la pulpa en el área quemada, dejar reposar por 15 o 20 minutos y luego retíralo con agua fría.
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