Durante el otoño crece la preocupación por la caída de pelo: ¿Es así o es solamente nuestra impresión? ¿Existe alguna explicación? Consultamos a una experta que nos puso al tanto de qué se trata el fenómeno que la puede provocar.
"A la caída de pelo que más vemos en otoño se denomina efluvio telógeno. Todos tenemos muchos folículos en fase de crecimiento y menos en fase de caída, pero cuando hablamos de efluvio telógeno, nos referimos a este fenómeno que tanto nos preocupa en el que se sincronizan muchos folículos que entran en fase de caída al mismo tiempo", Sabrina Alberti, responsable de Comunicación Científica de Biferdil.
La experta aclara, además, que "el efluvio telógeno puede estar generado por muchas situaciones diferentes. El estrés es una de ellas, causas hormonales, pero cuando hablamos de caída estacional, está más relacionada con los cambios ambientales y climáticos: variaciones de temperatura y horas de luz".
¿Por qué el otoño es un momento complicado para el pelo?
-La pérdida de masa capilar puede venir causada por los factores que durante el verano conspiran contra nuestra salud capilar. Como resultado de la acción de estas agresiones externas (como el sol, agua de mar, cloro, viento) se percibe la melena más apagada, débil e incluso se detecta más caída del cabello en la almohada y también en la ducha. El sol, por su parte, puede generar desbalances del microbioma del cuero cabelludo que incrementen la caída. También pueden acentuarla las quemaduras solares en este área.
Por otro lado, refiere Sabrina Alberti, "el otoño, coincide con la vuelta a la rutina, lo que genera un incremento del estrés que impacta directamente en la salud capilar".
Aunque, tranquiliza con un dato: "Es normal que todos los días se nos caiga el pelo. Los expertos hablan de que una persona sana puede perder al día unos 100 cabellos y esto esta considerado como un proceso normal".
No obstante, "en otoño esa caída puede incluso duplicarse. Recalquemos que se trata de una pérdida temporal y reversible".
La especialista aclara cuándo es momento de hacer algo: "Si la caída se prolonga por más de 3 meses, notamos una perdida significativa de densidad o, en el peor de los casos, zonas despobladas de cabello es necesario consultar con un profesional".
La importancia de elegir los productos adecuados:
Buscar y elegir los productos adecuados para la higiene, acordes al tipo de pelo, es esencial.
¿Cómo elegir el shampoo adecuado? "Lo que recomendamos es siempre elegir el shampoo en función de cómo notás tu cuero cabelludo. Si está graso y oleoso, deberás optar por uno que limpie en profundidad. Si, en cambio, lo notás reseco, deberías recurrir a uno más emoliente y gentil. En el caso de que notes picor o descamación, la elección deberá apuntar a productos con activos específicos para dichas condiciones".
Si bien existen miles de opciones en el mercado, explica Alberti, utilizar a diario productos que no se adecúen a las necesidades de tu pelo puede tener un efecto contrario indeseado.
A la hora de elegir un balsam o acondicionador, "debés prestar atención a los medios y puntas que suelen ser lo más castigado, sobre todo en los cabellos largos. Podés también incorporar una máscara semanalmente, como para reforzar aún más la nutrición de estas zonas".
Una terminado el lavado, es importante prestar atención a cómo desenredás y secás tu pelo:
-Para secarlo, evitá retorcer el pelo con la toalla. Si podés, usá una de microfibra.
-Los peines de dientes anchos son los más recomendables para desenredar el pelo. Comenzar de abajo (puntas) hacia arriba para evitar el quiebre.
-Con el pelo aun húmedo podés recurrir al uso de oleos o sérums reparadores de puntas, que sirven para retener la humedad y nivelar las zonas dañadas. Además, lo hará lucir más sano y brillante.
Tratamientos específicos para la combatir la caída del pelo
En el mercado hay una gran cantidad de productos (lociones, ampollas) para frenar la caída del cabello. "Aquí juega un rol fundamental la manera en que los aplicamos y sobre todo la constancia con la que lo realizamos", explica Sabrina Aliberti.
"Suelen aplicarse luego del lavado sobre el cuero cabelludo limpio y se complementan con un suave masaje, para favorecer la penetración del producto y activar la microcirculación sanguínea del cuero cabelludo, todo esto en la comodidad de nuestra casa".
Estos cuidados son el complemento ideal de los tratamientos médicos, como la mesoterapia, indicada para detener la caída del pelo, entre otros.
Qué pasa con el estrés
Es muy fácil de decir que evitemos el estrés, pero en la realidad muy difícil de aplicar por eso me gusta hablar de “gestión del estrés”, indica Aliberti, quien aclara que "los factores estresantes hoy pueden ser unos, mañana otros: lo importante es cómo reaccionamos ante ellos, cómo lo gestionamos".
"Cuando el cuerpo atraviesa situaciones o períodos de estrés, responde como si estuviera bajo ataque y desvía su atención de la producción de tejido “no esencial”, es decir, el cabello".
"El cortisol elevado (principal hormona del estrés) puede desregular otras hormonas clave, como el estrógeno y la progesterona".
"Por otro lado, los estrógenos son 'amigos' del cabello. Todos tenemos receptores de estrógenos en nuestros folículos pilosos, pero cuando disminuyen, se puede acortar el tiempo que el cabello pasa en su fase de crecimiento, incrementando la caída".
"Es importante, finalmente, destacar que los hábitos sanos diarios siempre hacen una diferencia, alimentarnos de manera variada incorporando las vitaminas y minerales necesarios e incluso realizar actividad física regularmente, impactan también sobre el bienestar capilar".
Fuente: Sabrina Alberti Responsable de Comunicación Científica de BIFERDIL
