Su popularidad va creciendo de a poco, sobre todo cuando se conocen sus virtudes: el ácido fítico es preventivo de la aparición de manchas. Además, puede ser usado en pieles sensibles porque no irrita.
Es un activo que podemos usar en verano y puede aparecer en las fórmulas de sérums, cremas hidratantes y protectores, funciona muy bien cuando se lo combina antioxidantes, como la vitamina C, con ácido glicólico o con otros despigmentantes, como el kójico.
El ácido fítico es un ácido orgánico presente en algunos vegetales, sobre todo en los que contienen fibra, como el maíz, el arroz, el trigo, las semillas de soja y en muchos de los cereales y legumbres.
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Por qué el ácido fítico se puede usar en verano
A diferencia de otros ácidos, no posee función exfoliante y no irrita, algo que sí puede suceder con los que se conocen como hidroxiácidos (AHA, BHA o PHA). No obstante, es usado en fórmulas exfoliantes para complementar la acción despigmentante de otros componentes que sí lo son.
En sí, el ácido fítico previene las manchas y reduce la producción de melanina, mientras que los ácidos que hemos comentado la tratan porque renuevan la piel.
En tratamientos de medicina estética es frecuente el uso de este concentrado en manchas rebeldes, como el melasma.
Cabe destacar que, si bien se puede usar en primavera y verano, su uso debe ser con responsabilidad y protegiendo la piel del sol. Nunca exponernos al sol (incluso, con protección) al momento de usarlo.
Si sos de las que se olvidan de usar protección a diario, quizás es mejor reemplazarlo en esta época por ingredientes más propicios, como la vitamina C.
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