Britney Spears ya recuperó su libertad y no hace otra cosa más que planes, mientras disfruta de la vida (como tanto ansiaba hacer). Hace unos meses anunció por sus redes su compromiso con Sam Asghari, el apuesto bailarín del que se enamoró hace más de cinco años.
Mostró en redes sociales su anillo de diamantes y comunicó con un ocurrente posteo que la diseñadora de su vestido de novia es la reconocida Donatella Versace, que ya trabaja en las líneas del traje.
En el posteo de Instagram en donde se la vio con un vaporoso vestido en rosa viejo la princesita del pop escribió: “No, este no es mi vestido de novia“. Para luego anunciar que Donatella Versace lo está creando en este momento.
La diseñadora italiana tiene un antecedente en el que todos tienen puesta la atención: el rupturista y único vestido de novia que lució Angelina Jolie para casarse con Brad Pitt. El diseño en blanco “sucio“ fue de satén de seda, el escote fruncido y tirantes con una falda larga hasta el piso sin cola y el velo presentaba impresos los dibujos de sus hijos.
Sin dudas, el nivel de personalización junto con la sofisticación y elegancia del diseño y los géneros ponen la vara alta para esta creación que tiene Donatella por encargo de la Princesa del Pop.
La fecha de la boda no está definida pero sabemos que la estrella de la música prefiere casarse de colores claros, aunque no necesariamente blanco. Con líneas de diseño que le aporten comodidad, que sean vanguardistas pero a la vez, femeninas.
Se cree que la boda transcurrirá en Los Ángeles, donde vive la pareja, y seguramente hagan una ceremonia íntima, sólo con los más fieles familiares y amigos de ambos.