No importa el tamaño que tenga: el dormitorio es el refugio más íntimo y privado y merece estar bien decorado. Y es que después de todo, una atmósfera que acompañe es parte del plan para descansar mejor y recargar energías.
Si querés saber si tu dormitorio está bien decorado y resulta confortable, pasá lista con nosotras: te compartimos los ítems que no pueden faltar en este espacio para que "lo tenga todo".
1. Una cama cómoda y confortable
Los colchones de la cama son una pieza clave que influye directamente sobre nuestra salud diaria. Es por eso que invertir en uno de calidad que cuide nuestra espalda y procure un sueño reparador, es una de las de decisiones más sabias para ganar salud física y mental. Pero también está la estructura, que debe ser proporcional al espacio, cómoda y funcional.
Así que si amas tu cama y cuando la miras sentís que "te llama", ¡tachá este ítem!
2. Ropa de cama linda y práctica
La ropa de cama es un ítem fundamental en cualquier dormitorio. Si bien su elección depende de gustos personales, conviene elegir opciones de calidad que sean confortables. Y en cuanto a los colores, podés jugar con diferentes tonalidades para que resalten en el espacio o ir por alternativas más relajadas neutras que inviten al relax.
Textiles como el lino y el algodón son tendencia esta temporada y se consagran como el comodín perfecto porque combinan con todos los estilos decorativos, del más clásico al más minimal.
Así que ya sabés, la ropa de cama no puede faltar en la checklist para tener un dormitorio bien decorado y súper confortable.
3. Un respaldo 'estrella'
Los respaldos tienen un rol clave en el dormitorio y su elección es una de las decisiones más importantes a la hora. Y es que además de de enmarcar la cama y darle una impronta personal al espacio, aíslan los ruidos y protegen del frío de la pared (además de mantenerla "a salvo" del roce de la cama).
Algunos de los modelos tendencia 2023 son: madera, fibras naturales o rejilla; capitoné; en formato XXL, desenfundables y envolventes.
4. Una mesa de luz que acompañe
Sea cual sea tu estilo, desde el más despojado hasta el híper maximalista, imposible privarte de una mesa de luz. Este pequeño mueble versátil es clave para tener un dormitorio bien decorado pero también funcional.
Eso sí, asegurate de que la altura coincida, más o menos, con la de tu cama para que resulte cómoda. Si elegís un modelo con cajones o estantes para dejar ahí lo necesitas junto a la cama (vaso de agua, libros, despertador...), mucho mejor.
5. Tonos claros pero también un toque de color
Los colores son otro imprescindible en un dormitorio bien decorado. Esta temporada reinan aquellos inspirados en la naturaleza: desde los tonos tierra en su gama más suave hasta verdes, azules potentes y algunos anaranjados. Se suman a través del color de alguna de las paredes o a través de complementos decorativos -como el respaldo y la ropa de cama- para crear un atmósfera más relajante y acogedora que invite al descanso y la desconexión.
Por otro lado, los tonos más claros son ideales como base para incentivar el relax y potenciar la luminosidad y amplitud visual.