En las últimas horas, la casa de Lily Allen y David Harbour revolucionó las redes sociales. La cantante británica y su marido, el actor estadounidense, fueron parte de una producción para la revista de diseño AD, en la que mostraron cada rincón de su espectacular vivienda ubicada en el barrio de Carroll Gardens en Brooklyn.
"Nuestra casa aparece en la portada de @archdigest este mes. Gracias @billycotton genio diseñador y ahora buen amigo, me encanta lo que hemos construido junto con @designbuildmade. Gracias @amyastley por tenernos en tu revista", detalla la publicación con un extenso carrousel de fotos que la intérprete de 'Fuck you' compartió en su cuenta de Instagram.
Pero más allá de la decoración maximalista y extravagante que predomina en cada ambiente de la vivienda, hubo un detalle particular que los fans no dejaron pasar y rápidamente se volvió viral.
Lily Allen y David Harbour y un homenaje a Maradona
En uno de los ambientes de la casa, en el que predomina el animal print, puede verse que la pareja colgó una imagen de Maradona a modo de homenaje.
Cabe destacar, que la cantante es una gran admiradora del ex futbolista argentino e incluso lo menciona en una de las líneas de su canción "L8 CMMR" ("Latecomer"): "Mi amor, mi amor, patea y hace goles como Maradona", dice Allen.
Si bien no faltaron los comentarios asegurando que se trataba de un 'fake', la imagen es real y puede verse en la galería de fotos que compartió la prestigiosa revista de diseño y arquitectura que estuvo a cargo de la producción.
Así es la casa de Lily Allen y David Harbour
La casa de la pareja, que se casó en Las Vegas en 2020 con un imitador de Elvis como maestro de ceremonias, está llena de excentricidades y es tan rara como maravillosa.
"El diseñador Cotton inició el viaje de diseño al establecer tres direcciones distintas para los interiores: inglés tradicional, casa moderna de Brooklyn y, finalmente, capas italianas, 'Como si hubieran heredado la casa de una abuela italiana chiflada con un gusto fabuloso'", detalla la nota de la revista AD.
El resultado es una vivienda donde se mezclan muebles antiguos con los modernos, rodeados de colores vibrantes, texturas y múltiples detalles que hacen de cada ambiente un espacio único.
