La sansevieria es un clásico de interiores. Es una de las típicas plantas que tenía la abuela en el jardín, que ahora se metió en los ambientes y se convirtió en tendencia deco.
También conocida como lengua de tigre o lengua de suegra, es una de las especies más resistentes y fáciles de cuidar. Además de que es muy decorativa gracias a sus llamativas hojas puntiagudas y curvadas, que funccionan como cualquier otro accesorio deco, con un alto valor estético.
Sin embargo (y a pesar de ser una planta que se las banca todas), puede pasar que notemos que sus hojas se vuelven cada vez más amarillas. ¡Pero a no alarmarse! Acá contamos qué hacer al respecto y cómo saber si realmente se está marchitando o está mudando de hojas.
Sansevieria: cómo distinguir si las hojas amarillas son por falta de agua o por un proceso natural de envejecimiento
- Hojas amarillas por falta de agua
Esto suele ser algo raro ya que -como te contamos anteriormente- esta planta es súper resistente y aguanta varios períodos de sequías. Ahora bien, si no la regaste en varios meses y notás que algunas hojas están secas y amarillentas o marrones, lo más probable es que le falte hidratación a sus raíces.
Para solucionarlo, solo tenés que ofrecerle los riegos adecuados y vas a ver como poco a poco mejora su aspecto.
- Hojas amarillas por envejecimiento
La muda de hojas es un proceso completamente normal y no deberías asustarte ni hacer nada al respecto. Es más, se recomienda no quitar las hojas amarillas y dejar que la propia planta la deseche.
Para detectar que se trata de hojas amarillas por envejecimiento tenés que ver que sean las hojas externas y viejas las que tomen ese color.
Cómo cuidar la Sansevieria
- Luz y ubicación: si bien es resistente en cualquier ambiente, agradece estar en lugares muy iluminados para fortalecer sus hojas y que crezcan rectas.
- Temperatura: entre los 15 ºC y los 25 ºC.
- Riego: se recomienda hacerlo únicamente cuando la tierra esté seca, ya que el exceso de agua podría perjudicarla. En invierno se recomienda regalarla solo dos veces al mes.
- Sustrato: no es muy exigente pero prefiere uno bien drenado.