Esta casa de una planta se explaya cómoda frente a un bosque, en el bellísimo balneario de Costa Esmeralda. Para marcar una diferencia con las típicas propuestas de la zona, las arquitectas del estudio Casa Orilla, con Valeria Sala a la cabeza, se jugaron por las fachadas oscuras revestidas en placas siding, combinadas con aberturas negras para acentuar la apuesta y, en perfecto contraste con un interior blanquísimo.
Los exteriores, en total black
La casa es un gran módulo de una planta con todas sus fachadas revestidas con placas de siding pintadas en un color oscuro (el 6993 de Sherwin Williams) y fue diseñada en 2022 por el estudio de Valeria Sala (@casaorilla) junto al equpo de M3 Construcciones.
El negro viste también el contrafrente, donde contrasta a full con la madera: el techo envarillado y el piso a modo de un gran deck de pino protegido (Cetol), forman la cajas de la galería.
"Nos parecía clave lograr que la galería tuviera luz natural para que también el interior de la casa fuera luminoso “, dice Valeria.
"Diseñamos muebles resistentes pero lindos y cálidos a la vez, que conviven perfectamente con los de interior”.
La pileta es de cemento alisado gris y tiene en todo su perímetro un escalón que hace de banco, ideal para sentarse en las tardes de calor y disfrutar de la vista al bosque. Las reposeras (diseño de @casaorilla) llevan colchonetas rayadas lavables (@solpalou).
Como contrapunto, interiores en blanco
El interior recibe con una apuesta al total white. Una chimenea revestida en machimbre pintado y enmarcada por dos cuadros con fotos de Costa Esmeralda (@_pilar.art) marca el centro de la escena en el living, con dos sillones modelo Ghost en tussor off white y almohadones en distintos tonos de grises (@casaorilla), una pareja de puffs (@rapsodiaoficial) y dos mesas viga en hierro y madera de guaica tratada, otro diseño del estudio de Valeria Sala.
Recibir es la cuestión
El recibidor fue un punto estratégicamente pensado en el diseño de esta casa. “Buscamos que quede un espacio en la entrada que haga de recepción, porque es una casa en la que nos encanta recibir y era fundamental tener un lugar pensado para despojarse”, dice Valeria. A tal efecto el espacio propone un banco de cañas (@marea.decohouse) y un perchero (@solpalou) con sombreros (@compañiadesombreros). Todos los pisos se unificaron en porcelantos Ecowood Puro (Ilva).
Un comedor a prueba de todo
"La mesa de comedor fue muy pensada ya que queríamos que fuera de madera clara, que tuviera formas orgánicas y que además de linda fuera resistente. En una casa pensada para ser vivida al máximo, con chicos de todas las edades, tenía que ser a prueba de todo”, describe Valeria.
La elección se inclinó finalmente por la noble madera de Zoita. Con las sillas buscaron contrastar el blanco puro del interior trayendo algo del color oscuro del exterior. Son de mimbre pintadas de negro con almohadones a medida, y suman sillones dobles en las cabeceras.
Sobre la elección de las luminarias, Valeria acota: “Buscamos algo que le aportara personalidad al espacio, por eso elegimos estas lámparas (@laplayera) que dan una luz increíble”, dice. Sobre la mesa, camino y candelabros (@marea.decohouse).
Toda la cocina tiene muebles de MDF laqueados en blanco, con herrajes negros que ayudan a reforzar esta idea de contrastes. La campana, la barra y los estantes son de madera de kiri y la mesada se resolvió en Silestone Blanco Norte. Un tapiz artesanal (Aldea Lobos) esconde un tablero de luces.
Impronta de playa para los dormitorios
El machimbre pintado de blanco cubre la pared cabecera y le da una impronta de playa a este dormitorio con vista al bosque. Para mayor remate, destaca elcuadro Beach (@solpalou). La ropa de cama en colores neutros suma unos almohadones traídos de India, bordados con la técnica cutwork. Como mesas de luz, troncos de madera y lámparas colgantes de fibras naturales (@casaorilla).
Los baños son similares en su planteo. En el primero, más chico, un mueble de petiribí macizo suma una bacha de apoyo (Peirano) sobre la mesada de Silestone Blanco Zeus. Acompaña un espejo de fibras naturales (@marea.decohouse).
En el principal, otro mueble de madera de petiribí con mesada de Silestone Blanco Zeus, bacha rectangular (Peirano) y grifería negro mate, suma un espejo con marco de hierro. Florero con eucaliptos (@marea.decohouse).
Un cuarto para cuatro. Cada cama tiene un nicho que cumple la función de mesa de luz individual, con su iluminación y un espacio de apoyo. El cuarto de invitados, con ropa de cama (H&M), mesa luz (@solpalou), lámpara (Dante hogar) y cuadros (@_pilar.art).
Para el cuarto de las camas cuchetas se buscó armar algo neutral, bien playero y liviano. "Priorizamos la practicidad antes que nada. Dejamos las cuchetas en madera natural, dándole calidez y cortando con el blanco de las paredes y los pisos”, describe la titular del estudio Casa Orilla.
Locación: Mery de la Cruz.
Producción desde Costa Esmeralda: Malu Satzger.
Fotos: Fabián Uset.