La provincia de Córdoba tiene algunas joyitas arquitectónicas que vale la pena conocer. Desde la primera casa de hormigón armado y la vivienda de verano de Julio A. Roca hasta los icónicos castillos de Mandl y Monserrat. Pero hay una construcción fascinante que pocos conocen. Se trata del Castillo de Wilkins, el único edificio de esta localidad hecho totalmente en piedra.
La historia del Castillo de Wilkins
Construir el Castillo de Wilkins en Tanti no fue tarea fácil. Entre 1900 y 1926, 50 picapedreros trabajaron sin descanso para dar forma a esta monumental obra. Lo más destacado de todo es que cada piedra fue ensamblada como un rompecabezas, respetando una simetría perfecta.
Su primer nombre fue San Alberto, en honor al pedido de su primer dueño, quien soñaba con una residencia que se fundiera con el paisaje arbolado de Tanti.
Pero no trabajaron solos: el diseño también tuvo el sello del arquitecto Yugoslavo Reljak, quien aportó ese aire medieval que lo hace parecer salido de un libro de cuentos.
Ahora, la parte más "pop" de la historia. En 1998, el reconocido cantante puertorriqueño Wilkins adquirió esta joya arquitectónica.
Luego de restaurarla a lo grande, organizó una celebración de esas que son para el recuerdo. Pero cuatro años después, en 2002, decidió cerrar las puertas al turismo. "Es mi casa", aseguró en su momento, buscando tranquilidad y privacidad.
Desde entonces, el castillo solo abre en ocasiones especiales, con el objetivo de que nuevos visitantes puedan conocer su historia y flamante arquitectura.
Cómo es por dentro el Castillo de Wilkins
El Castillo de Wilkins no solo sorprende por su construcción en piedra, sino también por los detalles interiores y exteriores que lo hacen único:
- Cinco dormitorios con vistas privilegiadas.
- Un salón principal con chimenea y piano, perfecto para cualquier escena de película.
- Una sala de té que respira estilo europeo del siglo XX.
- Jardines gigantes que incluyen una roca con una espada clavada (bien de estilo medieval).
- Un espacio donde se exponen vestuarios y pertenencias del artista puertorriqueño Wilkins.
- Vistas panorámicas a las sierras, un pantano, un arroyo y una arboleda centenaria.
El Castillo de Wilkins ubicado a tan solo 56 kilómetros de Córdoba Capital, es mucho más que una construcción de piedra: es un testimonio de historia, arte y esfuerzo.
Aunque no siempre está abierto al público, su sola presencia lo convierte en una postal imperdible para quienes visitan Tanti y sus alrededores.
Si pasás por la zona, podés conocer sus alrededores y llevarte una foto de lejos de esta obra maestra de la arquitectura cordobesa.
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