Si estás con ganas de cambiar la decoración de tu casa pero no querés meterte en obras engorrosas o invertir mucho dinero, nada mejor que ir por alternativas simples pero muy efectivas y económicas.
Acá te contamos cuáles son algunas de ellas para que vos también puedas tener la casa de tus sueños, sin necesidad de desembolsar un dineral o soportar meses de polvo y escombros.
Pequeños detalles
Los pequeños objetos y complementos deco con los que decidís decorar cada ambiente de tu casa dicen mucho.
Por eso si querés renovar algún espacio de tu casa, podés empezar por ellos: desde un espejo hasta un cuadro, una alfombra, una planta o una vela aromática.
Las opciones son muchísimas y la clave está en ir por aquellos accesorios que más te gusten, evitando comprar por comprar.
Otra opción para darle un nuevo aire a un ambiente específico sin gastar mucho dinero, es cambiando los textiles.
Los almohadones son una de esas piezas tan imprescindibles como problemáticas. Su presencia viste mucho el espacio, por eso no acertar con este complemento puede suponer un problema.
Para darle un lavado de cara a cualquier ambiente, apostá por cambiar su funda o sumar otros nuevos. En el mercado actual podés encontrar un montón de opciones para todos los gustos y bolsillos.
También podés sumar alguna manta canchera o cambiar las cortinas por diseños más modernos y atemporales (las cortinas de gasa y de arrastre son la última tendencia).
Decoración hecha a mano
Cambiar la decoración de tu casa puede ser un plan muy divertido para hacer vos sola/o o con amigos y en familia.
La decoración DIY, además de ser una de las tendencias más aclamadas de la temporada, es una opción perfecta y económica para cumplir tu objetivo.
Restaurar muebles antiguos, crear muebles con pallets, lámparas con botellas de cristal o tapizar vos misma el cabecero de la cama son algunas de las propuestas que mejor resultado aseguran y que más divierten en el proceso.