Seguramente conocés a alguien comenzó con un par de cactus y suculentas, y rápidamente se convirtió en un coleccionista. Hay que admitirlo: el mundo de las crasas es fascinante, ya que además de ser plantas divinas, no requieren de cuidados muy exigentes, se reproducen fácil y se desarrollan prácticamente en cualquier espacio. Solo hay que conocer algunos trucos para mantenerlas sanas y radiantes en cualquier estación del año.
En esta nota especial de la Semana Deco Para Ti, acudimos a Mechi de De Raíz (@mechideraiz), nuestra experta en jardinería, para que nos cuente todo sobre estas especies tan populares.
Las plantas suculentas o crasas -del latín suculentus, que quiere decir "muy jugoso"- son aquellas en las que la raíz, el tallo o las hojas, se han engrosado para permitir el almacenamiento de agua en cantidades mayores que en el resto de las plantas. Dentro del universo de las suculentas se destaca una familia en particular: la de los cactus.
Se trata de plantas vivaces, que en general poseen aréolas o una cubierta de espinas, y soportan la sequedad como unas campeonas. En efecto, las suculentas son todas las plantas que presentan tejidos en sus hojas o ramas en las cuales se acumula agua.
Trucos infalibles para que tus cactus y suculentas estén siempre divinos
1. Siempre acertamos más si no regamos que si regamos en exceso.
2. La falta de riego siempre resulta fácil de comprobar: cuando se alargan y adelgazan las hojas. Lo bueno es que cuando le ponemos un poco de agua, se recuperan rápidamente.
3. Como norma general, la mayoría de los cactus deben trasplantarse cada dos años. La mejor época para hacerlo es en primavera o después de la floración.
4. El terreno o sustrato de la maceta debe ser arenoso y fertilizado con buen compost orgánico, además de buen drenaje.
5. Abonar en otoño permite acumular nutrientes para rebrotar y florecer en primavera
6. No se debe mojar la hoja durante el riego para evitar aparición de hongos.
7. Dejar secar el sustrato entre riego y riego.
8. En invierno los riegos deben ser mínimos o nulos.
9. Si bien algunos cactus soportan vivir en interiores, se desarrollan mejor al aire libre.
10. Observar periódicamente el ataque de cochinillas, pulgones, arañuelas roja y babosas, que es lo más común. Aplicar jabón potásico o tierra de diatomea en caso que aparezcan o para prevenir.
