La freidora de aire, también conocida como Airfryer, es uno de los de los electrodomésticos furor del momento. Y no es para menos, ya que logra que los alimentos que antes se consideraban 'prohibidos' por su alto contenido en grasa (como las papas fritas) sean un poquito más saludables al cocinarse con aire caliente que circula rápidamente en lugar de grasa.
Y otra de las ventajas es que ¡la limpieza es fácil! Como cualquier pequeño electrodoméstico, necesitan un lavado a fondo de vez en cuando. Acá te contamos cómo hacerlo correctamente y en pocos pasos.
Cómo limpiar el interior o la resistencia de una freidora de aire
- Desenchufá tu freidora. Siempre comprobá que no esté caliente.
- Retirá la cesta, la sartén o la bandeja y lávala bien con agua caliente (también podés hacerlo en el lavavajillas).
- Limpiá el interior de la Airfryer, incluida la resistencia, con una esponja suave o cepillo de cerdas blancas o de dureza media. Después pasale un paño limpio y húmedo, y luego uno seco.
- Aprovechá para limpiar también el exterior de la freidora con un paño suave.
- Una vez que hayas limpiado todo y colocado las piezas desmontables bien secas adentro, encendé la freidora y dejá que funcione durante unos minutos sin alimentos.
Tené en cuenta que las freidoras de aire se deben lavar con detergentes no abrasivos y con esponjas suaves que eviten lijar el material antiadherente. Lo mejor es usar un desengrasante como el jabón del lavavajillas, el vinagre blanco y usando un paño de microfibra o la parte suave de una esponja corriente.
Cómo sacar la grasa de una freidora de aire
En caso que la grasa se encuentre demasiado incrustada, podés rociar un poco de vinagre blanco en las zonas más afectadas y dejar reposar por un periodo entre 10-15 minutos. Cuando la suciedad reblandezca, vas a poder limpiar de manera sencilla. Igualmente, se puede colocar un chorro de agua caliente en el interior de la freidora junto con el jabón por treinta minutos hasta que se lave.