Seguramente los hayas visto en algún lado... Los vestidores abiertos ganan terreno esta temporada y conquistan las diferentes plataformas de inspiración como Pinterest e Instagram.
Se trata de una alternativa súper canchera y funcional de guardar la ropa que permite ahorrar espacio y dinero. Fáciles de armar o desarmar, son ideales para habitaciones pequeñas. ¿El único requisito? tratar de mantener el orden, ¡todo está a la vista!.
Ventajas de "abrir tu placard"
La principal ventaja que tienen es que brindan la posibilidad de ahorrar espacio y reducir costos. Colocar una linda barra para colgar las perchas en algún rincón de la habitación, no va a salir lo mismo que comprar un armario con puertas.
Otras de las ventajas es que brindan una sensación extra de amplitud y que son súper simples de armar o desarmar.
La practicidad también es otro fuerte: al estar todo a la vista, es más fácil decidir qué prenda usar y con cuál combinarla.
Desventajas de "abrir tu placard"
Si bien son súper estéticos a simple vista, la principal desventaja es que tienen al orden como base, ¡todo está a la vista!. Esta quizás no sería la mejor opción si sos de los que les cuesta mantener ordenado el placard.
Sin embargo, existen algunos recursos para mantener la ropa y los accesorios bajo control, como algunos lindos cajones en distintos tamaños de fibras naturales o forrados, para guardar las cosas que no se quieren dejar a la vista. Para este caso, se pueden colocar estantes flotantes sobre la barra o simplemente ubicar los contenedores en la parte de abajo.
¡Que no falten los accesorios decorativos!
Si decidiste "abrir tu placard", no pueden faltar algunos complementos como una buena alfombra y un espejo de cuerpo entero. Ellos no sólo suman un plus decorativo, sino que también cumplen con un rol súper funcional.