Las antiguas lenguas aseguran que la presencia de esta planta influye de manera positiva en la concentración, el conocimiento y la abundancia.
Si se elige creer en esta cualidad y además se le suma la increíble belleza que radica en sus flores, la azalea se convierte en una de las mejores especies para regalar, atraer la buena suerte y decorar los diferentes espacios.
Se adapta tanto en interiores como en exteriores y sus cuidados no son muy complicados.
Sin embargo, conviene repasar algunas de sus características principales y conocer sus secretos para que luzca siempre espléndida y se convierta en la estrella del espacio conquistando todas las miradas.
El nombre de la azalea proviene de la palabra griega azaleos, que significa seco (probablemente debido a sus tallos leñosos). La primera se cultivó en Japón, y hasta el siglo XVIII no apareció en Europa, donde ganó popularidad gracias a sus vistosas flores.
Perteneciente al género Rhododendron indicum o simsii, se trata de un pequeño arbusto que, debido a las múltiples hibridaciones, se transformó en una especie con una floración intensa y con una gama de colores mucho más amplia, entre los que se destacan rosa, blanco, naranja y rojo.
Pero a pesar de sus múltiples puntos favor las azaleas resultan tóxicas si se ingieren, por lo que se recomienda mantenerlas lejos de los niños y las mascotas.
Tipos de azaleas
- Azalea rosa (Rhododendron Blaauw’s Pink o Kurume)
- Azalea japonica cristina (Rhododendron Christina Girard)
- Azalea karen (Rhododendron Karen)
- Azalea blanca (Rhododendron Pleasant White)
- Azalea de montaña (Rhododendron ferrugineum)
Cómo cuidarlas
- Estamos justo en la mejor época para plantas azaleas: la primavera. Se recomienda hacerlo en un espacio fresco y húmedo a la semisombra pero con luz natural indirecta.
- Las temperaturas ideales oscilan entre los 8°C y 16°C. En el interior, se recomienda colocarlas en zonas con bastante ventilación. En el exterior, simplemente hay que protegerlas del frío, y sobre todo, de las heladas.
- Sus riegos deben ser frecuentes -preferiblemente con agua de lluvia- de modo que el sustrato se mantenga siempre húmedo. También se pueden pulverizar sus hojas.
- Su sustrato debe ser ácido, con mucho hierro y contar con un buen drenaje que evite los encharcamientos y permita que sus raíces se aireen.
- Se reproduce por esquejes de brotes que se plantan a una profundidad de 2 cm, y a una distancia de metro y medio entre cada arbusto.