Por más limpia que esté tu casa, es probable que siempre encuentres algo de polvo. Este gran enemigo es algo más que una simple molestia ya que todas esas partículas que lo componen se suman: suciedad, polen, moho, pelos, fibras de los tejidos, entre otros. Por eso, también puede ser un foco de problemas para la salud y la calidad de vida de las personas que padecen asma, alergias u otros problemas respiratorios.
Por estos motivos, resulta fundamental combatirlo. Acá te compartimos los mejores tips y trucos caseros para eliminar el polvo de una vez por todas.
1. Ventilá antes de limpiar
Para que el hogar este libre de gérmenes y bacterias es importante contar con una buena ventilación. La entrada de aire fresco no solo proporciona luz y calidez sino que estos agentes causantes de alergias salgan de casa.
Eso sí, no ventiles la casa entera, ventilá por ambientes para que el polvo no se mueva y esté "controlado".
2. La aspiradora, tu mejor aliada
La aspiradora es un electrodoméstico indispensable para las zonas más difíciles de limpiar como debajo de los sillones o los rincones. Además, al aspirar, el polvo no se esparce por aire (como sí ocurre con la escoba).
Un tip: insistí en las zonas con cables, como la parte de atrás del mueble de la tele o la computadora.
3. Limpiá el piso con productos específicos
Después de barrer o pasar la aspiradora, fregá bien los pisos así te asegurás de eliminar por completo el polvo que haya quedado.
4. Aplicá un antipolvo
En el mercado actual podés encontrar una amplia variedad de limpiadores quita polvo que consiguen neutralizar la electricidad estadística que atrae el polvo y retrasan su aparición, evitando que se asiente sobre las distintas superficies.
5. No sobrecargues el espacio
Los ambientes repletos de muebles, objetos y complementos acumulan polvo. Lo ideal es apostar por una decoración sencilla, con pocas cosas y dejando libre las esquinas y los rincones de difícil acceso.
6. Elegí pinturas antipolvo
En el mercado actual podés encontrar una amplia variedad de esmaltes y pinturas que repelan el polvo y la suciedad. ¡Tenelas en cuenta!
7. Invertí en un purificador de aire
Si podés, utilizá purificadores de aire para filtrar el aire que se respira en tu espacio y librarte del polvo, el polen y otras sustancias antes de que se asienten. ¡Es una buena inversión!