De ratán, mimbre, macramé, hierro o madera; redondos, cuadrados o rectangulares; en la pared o apoyados sobre alguna superficie. En cualquiera de los casos, los espejos ocupan un rol clave y multifuncional dentro del hogar y se consagran como de los elementos favoritos de la decoración de interiores.
Pero hay que admitir que hay que limpiarlos con cierta frecuencia para que se luzcan con todo su esplendor y cumplan su función, sobre todo si están ubicados en lugares donde se acumula mucho polvo, grasa u otros factores como el maquillaje.
Sin embargo, puede pasar que nunca queden del todo limpios. Por eso acá te compartimos los mejores trucos de limpieza para que los dejes impecables.
Tips para limpiar espejos sin dejar marcas
1. Usa siempre paños suaves. Algunos trapos pueden largar pelusas que resultan súper difíciles de eliminar.
2. El papel de diario es uno de los mejores aliados a la hora de limpiar espejos. Solo tenés que humedecer un papel, limpiar la suciedad y luego repasar con otro un papel de diario seco para que no quede ninguna marca.
3. El vinagre es otro gran aliado para eliminar las manchas más difíciles que aparecen en los espejos. Podés rociar el papel de diario con un poco de vinagre blanco o crear una solución con vinagre blanco y agua, y luego aplicarla directamente sobre el espejo.
4. También tenés la opción de sustituir el vinagre blanco por jugo de limón, que sirve para limpiar y pulir el espejo. Solo tenés que añadir tres limones exprimidos a un cubo de agua y aplicar la mezcla sobre el espejo con un paño suave.
5. En el mercado actual también podés encontrar un montón de limpiadores específicos para espejos.
Cómo eliminar manchas difíciles y grasa de los espejos
Si tu espejo tiene manchas de pintura, una de las soluciones más efectivas es usar un algodón embebido en quitaesmalte y limpiar suavemente la superficie. Podés repetir este proceso la cantidad de veces que sea necesario hasta que la mancha se ablande por completo y puedas eliminarla.
Ahora bien, si tu espejo tiene mucha mucha grasa porque está en la cocina, lo ideal es preparar una solución de agua con alcohol y amoníaco en partes iguales. Para un mejor resultado, se recomienda secarlo con secador de pelo.
Para evitar la acumulación de manchas y suciedad, lo mejor es limpiar los espejos regularmente.
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