Uno, dos, tres días de lluvia o mucha humedad… Las sábanas y toallas sucias (además de la ropa, claro) se acumulan y nos desesperamos. ¡Todo un drama!
Y es que por más que las lavemos, estas condiciones climáticas hacen que su secado sea mucho más difícil. La buena noticia es que existen algunos trucos que te facilitarán la tarea y evitarán que estas prendas queden con olor a humedad. Acá te contamos cuáles son las más efectivas.
Cómo secar sábanas y toallas correctamente
- Programas de lavados cortos y con centrifugado
Una de las recomendaciones más fáciles y efectivas es utilizar programas cortos con centrifugado. De esta manera, las prendas van a ser un poco "más secas" después de ser lavadas.
- Tender rápido
Una vez terminado el lavarropas es súper importante colgar las prendas cuanto antes. Y es que si las dejamos mucho tiempo adentro del tambor, arrugadas y mojadas, lo único que conseguiremos es que aparezca olor a humedad.
- ¿Adentro o afuera?
Depende el clima. Pero si está lindo, nada mejor que aprovechar las mañanas de sol para conseguir que las prendas se sequen al aire libre. Ahora bien, en caso de que llueva, hay que tender adentro. (Acá te compartimos algunos tips para secar la ropa cuando llueve).
- Colgar las prendas bien separadas y con broches
Al tender prendas grandes como sábanas, toallas y edredones, es fundamental colocarlas bien separadas entre sí y usar broches. De esta manera, evitamos doblarlas y que tarden más en secarse. (Cuanto más estiradas estén, mejor: se van a secar antes y, en consecuencia, acumularán menor humedad y malos olores).
- ¿Prendas un poco humedas? Mejor no guardarlas
Esperar a que esta prendas se sequen completamente antes de guardarla es súper importante. Incluso si está solamente un poco mojada o húmeda. Por eso, antes de guardarlas en el armario, chequeá que estén 100% secas para evitar el desagradable olor a humedad.
Bonus track: tips para secar la ropa cuando llueve
- Un truco que no falla: colga la ropa en un tender bajo techo y debajo colocá un ventilador. El aire moverá las prendas y hará maravillas.
- Otro recurso puede ser, si tenés garage, colocar sogas e improvisar un tenderero allí para los días de lluvia.
- Escurrirla: colocá la prenda sobre una toalla grande extendida y hacé un rollo de forma que la toalla envuelva la prenda mojada. Después, retorcela hasta exprimirla por completo. La humedad presente en una prenda será absorbida por la otra.
- Colgá la ropa por encima de un calefactor.
- Para un caso de urgencia, podés poner la ropa mojada doblada dentro de una bolsa y dejarla toda la noche en el congelador. Hacerlo hasta que esté completamente seca. Y luego, pasarle la plancha para quitarle el frío.
- Secador de pelo: siempre manteniendo una distancia de 15 centímetros para evitar que se dañen las prendas, podés secar ropa interior o medias con el secador de pelo.
