El reconocido actor Will Smith y su esposa Jada Pinkett, acaban de desembolsar nada más y nada menos que $11,3 millones de dólares para comprar una nueva -y lujosa- residencia en la prestigiosa comunidad de Hidden Hills, también conocida como "tierra de los famosos".
La mansión cuenta con un total de 10.400 pies cuadrados de espacio habitable y está situada en un callejón sin salida sobre lo alto de una colina ofreciendo increíbles vistas repletas de vegetación y ganando una buena privacidad.
En la mayoría de los ambientes prevalece un estilo moderno y tradicional con la paleta de los neutros como protagonista. Los pisos de roble blanco de tablones anchos aportan una dosis justa de calidez y contribuyen a que los espacios luzcan más acogedores.
La planta baja se caracteriza por seguir un plano de concepto abierto -open concept- y cuenta con amplios ventanales que permiten una conexión directa entre interior y exterior.
Ambos livings ubicados en la planta baja se caracterizan por ser amplios, luminosos y seguir una paleta cromática neutra y ser muy cálidos y acogedores con abundancia de textiles y almohadones. Los detalles decorativos le dan el cierre perfecto a ambos espacios.
La cocina es un lujo. Está equipada con alacenas de madera clara, mesadas de mármol, dos islas amplias (una funciona como barra desayunadora y otra para almacenar diferentes utensilios) y electrodomésticos de alta gama. Los amplios ventanales también se hacen presentes en este sector privilegiado de la casa y permiten una conexión directa con los exteriores repletos de vegetación.
El comedor principal se destaca por seguir un estilo de decoración clásico pero con guiños retro. La mesa cuenta con una estructura de hierro y tapa de madera clara además de espacio para 12 comensales gracias a las sillas tipo cannage. Dos lámparas de diseño sobrevuelan sobre este sector y, junto con los detalles deco como cuadros y una ficus pandurata, le dan el cierre perfecto.
Terminando con el recorrido y subiendo por la escalera, llegamos a la planta alta en la cuál se encuentran los dormitorios principales y algunos de los lujosos baños.
El dormitorio principal es súper amplio y luminoso gracias a los enromes ventanales que ofrecen vistas despejadas hacia el exterior. Una cama king zise se luce junto a un respaldo de cama alto y también un mini living con tres sillones de color gris claro.
Sin dudas, la línea de decoración que predomina en esta habitación es simple y relajada pero también cálida y acogedora.