Carolina de Mónaco está cumpliendo años este domingo. La princesa de Mónaco, símbolo de glamour y elegancia y amada por su pueblo, está festejando sus 65 años en un momento en el que no todo es felicidad en el principado.
La mayor de los hijos de Rainiero y Grace Kelly está desde hace meses supliendo la figura de la princesa Charlene, ausente desde hace casi un año de la vida pública de Mónaco y, desde noviembre, internada en un exclusivo centro de rehabilitación de personas con problemas de salud mental, en Zurich.
Su bien durante los primeros meses de la ausencia de Charlene, que viajó a Sudáfrica en mayo y recién pudo volver seis meses después por haberse enfermado -tuvo una infección en la boca por la cual tuvo que ser intervenida quirúrgicamente tres veces-, Carolina no ocupó su lugar, sí lo hizo en el último tiempo.
La hermana mayor de Alberto apareció en público junto a sus sobrinos Jacques y Gabriella, y posando al lado de Alberto y Estefanía, su hermana menor.
A nivel personal, la princesa -que hace meses luce una expresión seria en su rostro- está atravesando un momento de plenitud como abuela. Sus tres hijos mayores, Andrea, Charlotte y Pierre Casiraghi, han formando hermosas familias y le han dado siete nietos. La menor, Alexandra de Hannover, permanece soltera.
Andrea tiene tres hijos con Tatiana Santo Domingo; Charlotte es mamá de Raphael, fruto de su relación con Gad Elmaleh, y de Balthazar (de su actual matrimonio con Dimitri Rassam); y Pierre, que está casado con Beatrice Borromeo, tiene dos chicos, Stefano y Francisco.