Carlo Acutis, el adolescente italiano beatificado el pasado 10 de octubre, que murió de leucemia a los 15 años en 2006, es considerado un "mecenas de Internet" y un ejemplo de cómo se puede vivir la fe hoy.
Nicola Gori, editor del Osservatore Romano y persona autorizada por la familia para escribir la biografía del joven, reveló un aspecto poco conocido de la vida del beato millenial: él obró el milagro de convertir al cristianismo a Rajesh Mohur, el empleado doméstico brahmán hindú que había contratado la familia Acutis para que cuidara a Carlo.
El milagro conocido de Carlo fue haber curado de una enfermedad letal a Matheus, un ñino brasilero
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Carlo ha desarrollado un enorme talento "para atraer a las personas a Dios", informó su biógrafo y postulador para la beatificación. Para comprender esto, hay que ver también su efecto en el entorno inmediato: "Fue él mismo quien llevó a su familia a la aventura de la fe". Como su madre Antonia informó más tarde, su hijo ya la había avergonzado cuando era pequeña con muchas preguntas sobre religión a las que no tenía respuesta. Un sacerdote a quien consultó por consejo de un amigo religioso le sugirió que debería conocer mejor la fe católica. Los padres también se adhirieron a esto, comenzaron a ir a la iglesia ellos mismos y siempre apoyaron a su hijo en este sentido.
Un ayudante doméstico que la familia había contratado para que cuidara y acompañara a Carlo, el brahmán hindú de Rajesh Mohur, podría decirse que es otro de los milagros del joven: se convirtió a la fe católica gracias a su testimonio de vida.
Rajesh lo acompañaba a todas partes, y Carlo desde siempre lo trató más como un amigo que un empleado. “Todos en el vecindario lo conocían. Cuando pasaba en su bicicleta se detenía a saludar a los porteros, muchos de ellos musulmanes o hindúes.(Ellos estuvieron presentes en su funeral) Les habló de sí mismo, de su fe y escucharon a este joven amable y afable, dulce y encantador. A la hora del almuerzo ponía la comida sobrante en recipientes de comida para llevar a las personas sin hogar de la zona”, contó Rajesh que fue hasta Asís para estar presente en la ceremonia de beatificación de Carlo.
Rajesh se convirtió y pidió recibir los sacramentos. "¿Cómo es posible que un niño tan pequeño hablara con tanta madurez y amor de su fe? ", planteó Rajesh en una entrevista: “Dijo que sería más feliz si me acercara a Jesús. Me bauticé como cristiano porque él se comunicó conmigo y me cautivó con su fe, su caridad y su pureza”.
“Siempre lo consideré más allá de lo normal porque un hombre tan joven, guapo y rico normalmente prefería vivir una vida diferente", agregó. Y comentó también: “Pero Carlo no sabía lo que significaba una "vida diferente". Además contó que el beato una vez usó sus ahorros para comprarle una bolsa de de dormir al vagabundo que veía cuando iba a misa. Y donaba dinero a los capuchinos, que servían almuerzos para los vagabundos”. Una vida ejemplar.