Pampita impactó a la opinión pública el fin de semana con la noticia de su embarazo. La confirmación del rumor no hizo más que poner el foco en el feliz presente de la modelo y conductora, que ha logrado armar una familia ensamblada con el empresario Roberto García Moritán. "Les queremos confirmar que esta familia grande va a ser más gigante todavía", dijo la modelo el domingo en un vivo de Instagram, donde anunció además que será madre de una nena.
Las fotos del momento hablan por sí solas acerca de la comunión familiar que se vivía, en el cual Pampita y su marido estaban rodeados de los hijos de ambos, Bautista, Beltrán y Benicio, los chicos que la modelo tuvo con Benjamín Vicuña, y Santino y Delfina García Moritán, fruto del primer matrimonio de Roberto con Milagros Brito.
La familia ensamblada que han formado cuenta también con el visto bueno de los ex de ambos y en ambos casos parece reinar la armonía. Benjamín Vicuña, por ejemplo, supo del embarazo de su ex al mismo momento que los hijos en común. Ya lejos de conflictos, Pampita lo llamó por teléfono para contarle que estaba esperando un bebé de García Moritán antes de anunciarlo públicamente.
En el caso de Milagros Brito, la ex de Roberto y madre de sus dos hijos, felicitó a Pampita públicamente luego del anuncio del embarazo y hasta compartió en su Instagram una foto familiar donde aparecen sus hijos, los de Pampita, la feliz pareja y ella misma. "La familia de mis hijos es mi familia", expresó.
Según la counselor Claudia Quiroga Daldi, el concepto de familia ensamblada no es nuevo, pero aún quedan algunas dudas cuando hablamos del tema. "Entendemos por ella a un modelo de familia en la cual uno o ambos miembros de la pareja tienen hijos de uniones anteriores. Pueden ser viudos, divorciados o madres solteras", dice la especialista de la Asociación Argentina de Counselors.
Y añade: "Desde el counseling, creemos que las definiciones no alcanzan para entender realmente qué es una 'familia', o al menos no nos permite comprender a todas las familias. Por eso, nos preguntamos: ¿es necesario llegar a alguna definición más abarcativa?".
Quiroga Daldi dice que en tiempos donde abundan las etiquetas, sabemos que hay muchas clases de familias: monoparentales, homoparentales, extendidas, ensambladas y un sinfín de etcéteras. "Pero el nombre, la denominación o caracterización solamente es interesante si nos ayuda a aceptar que el concepto de familia cambió, evolucionó, que ya no es más un ideal donde un papá, una mamá y sus hijos formaban un grupo compacto e inquebrantable", explica.
"La familia es nuestro grupo primario de pertenencia, su importancia es innegable, por eso ¿cuál es el elemento que caracteriza a este grupo de personas que conviven unidas por lazos de parentesco?", agrega. Y continúa: "El elemento central puede ser el amor. El amor que los une los convierte en familia. Es la única condición imprescindible. El amor hace que los vínculos, aún los recientes, sean sólidos".
La counselor afirma que no es posible afirmar que el caso de familias ensambladas sea fácil su conformación, pero sí puede ser simple si se establece una relación amorosa entre sus miembros. "Y desde el amor aprender a comunicarse; la comunicación es la que hace perceptible para todos la profundidad del sentimiento que los une", agrega.
La especialista afirma que, en caso de aparecer dificultades en el seno de cada familia ensamblada, como dificultades de adaptación o crisis de alguno de los miembros, la solución debe llegar a través del diálogo. "A través de una comunicación fluida, abierta, sincera, comprendemos las necesidades del otro porque las conocemos y no las suponemos y logramos que comprendan las nuestras porque nos permitimos transmitirlas.
Comunicarnos desde el amor, ese es el secreto", concluye.
Más información en parati.com.ar
