Puede decirse que es una marca personal de Katy Perry el hecho de elegir looks osados y transformarse casi por completo. Y para su último lanzamiento, el video “Hey Hey Hey”, la cantante no hizo excepciones. Entre corsets, telas abullonadas, pelucas y joyas extravagantes, se dio el gusto de evocar la parte más glamorosa de la Revolución Francesa.

La podemos observar con dos importantes vestidos que evocan el diseño fashion de la aristocracia francesa, confeccionados con metros de fastuosas telas bordadas y con apliques, diseñados para marcar la cintura y resaltar el busto. Tanto en colores pasteles, como brillantes.

El make up merece un capítulo aparte: piel de muñeca de porcelana, cejas finitas, pestañas frondosas y largas, con sombras y labios en colores fuertes y bien destacados. Cuesta reconocerla con semejante transformación.