En épocas donde la lucha por la equidad y la diversidad son cada vez más visibles y abarcan espacios más amplios en la sociedad, los museos no pueden quedarse al margen.
Esta lógica fue considerada por el Museo de Arte McNay en Texas, que anticipándose a los cambios en la audiencia, busca fomentar la crítica social sobre los géneros binarios y la identidad.
Este espacio de arte, ubicado en San Antonio, decidió presentar la muestra “Transamerica / n: Gender, Identity, Appearance Today”.
Se trata de obras contemporáneas que exploran la construcción de la identidad a través de la apariencia y el género.
Esta exposición, pensada para conmemorar el 50 aniversario de los disturbios de Stonewall en 1969.
Su objetivo es “celebrar las voces auténticas, bellas y vulnerables de los artistas contemporáneos norteamericanos que expresan su verdadero yo a través de un amplio espectro de género”, explica el museo en su web.
Los disturbios de Stonewall fueron una serie de manifestaciones en protesta contra una redada policial en el pub Stonewall Inn, ubicado en Greenwich Village.
Es usual que se citen estos acontecimientos como la primera oportunidad, en la historia de Estados Unidos, en que la comunidad LGTB luchó contra un sistema que los perseguía.
La muestra
El arte, en esta muestra, “habla a la familia, la comunidad, el autodescubrimiento y, en última instancia, la identidad”.
Entre las obras, se destacan artistas como Andy Warhol, Robert Mapplethorpe, Catherine Opie, Greer Lankton, Frank Benson, Xavier Schipani y Jacolby Satterwhite.
"Esta exposición es sobre el amor", resaltó Richard Aste, director de McNay.
En ese sentido, el responsable del museo sostuvo que estos espacios pueden tender “puentes entre sus comunidades”.
Si bien esta exposición no deja de generar controversia, el museo preparó presentaciones para que los espectadores puedan navegar por la misma con términos asociados a las identidades de género no binarias.
El curador del programa, René Paul Barilleaux, consideró a la muestra como un “momento de enseñanza”.
"Todos deberían poder verse a sí mismos, sus culturas, sus identidades y sus pasiones reflejadas en nuestras colecciones y exposiciones", resaltó Barilleaux.