Hay dos días en Holanda que son importantísimos: el de la Liberación, que se celebra el 5 de mayo, y el del Rey, el 27 de abril, que implica varios eventos previos hasta llegar hasta esa fecha en honor a Guillermo. Para ambas ocasiones, con un año de diferencia, la reina Máxima Zorreguieta se inclinó por el mismo outfit, sin importarle los comentarios negativos que podría generar su decisión. Y de hecho no los hubo, todo lo contrario.
IMPECABLE. El vestido en cuestión se trata de un diseño del danés Claes Iversen, uno de los modistos preferidos no sólo de la argentina sino de varias royals como Letizia y Meghan Markle. Con una falda al mejor estilo princesa de cuento, la parte superior completa de lentejuelas y un cinto ancho de Salvatore Ferragamo que marcaba su cintura, la esposa de Guillermo volvió a brillar. Al igual que el año pasado, lo combinó con unos zapatos de taco ancho y una cartera trenzada de Bottega Veneta. El único cambio que hizo fue el de los aros, que esta vez optó por unos que no eran colgantes como los anteriores.
¿ESTÁ MÁS JOVEN? Esa es la pregunta que anda rondando por las redes. El secreto está en el peinado. El año pasado lo usó semi recogido y para este evento se inclinó por llevarlo suelto y de costado. Ese simple detalle le disminuyó unos cuantos años a su rostro. El resto, como dijimos, fue todo igual, incluso el clutch y el fular color nude.
Evidentemente la reina quedó encantada con su vestido “Anja” de la colección Couture Wanting, Needing, Waiting de 2018 que fue adaptado específicamente para ella.
¿Un dato más? El rey tomó su ejemplo y también se inclinó por el reciclaje, ya que usó la misma corbata que en aquella oportunidad. ¡Un aplauso para la pareja real!
Texto: Paula Labonia
Fotos: Instagram y Fotonoticias