Marco Estell volvió a ser noticia hace pocos días cuando se supo que su hijo Marcos Alberto Stella, de 45 años, había sido detenido luego de haber sido condenado por los delitos de “amenazas coactivas, robo e incendio”, en el marco de una causa de violencia de género iniciada tras una denuncia de su ex pareja.
Estell, que ahora tiene 65 años, fue estrella de la televisión en los años ochenta y formó parte del grupo de los conocidos "galancitos", que también integraban Ricardo Darín, Carlín Calvo, Gabriel Corrado y Gustavo Bermúdez entre otros.
Pero, además, durante esos años de esplendor, Estell vivió una historia de amor con la actriz Graciela Cimer que terminó trágicamente el 2 de julio de 1989 cuando la mujer se quitó la vida arrojándose desde el primer piso de la casa de sus padres, en Sarandí, partido de Avellaneda, en la provincia de Buenos Aires.
Quién fue Graciela Cimer
Graciela se había hecho famosa siendo una niña, cuando interpretó el rol de Etelvina Baldasarre, la malvada rica de la novela infantil "Jacinta Pichimahuida". Con el éxito de la tira, Graciela se convirtió en la niña mimada de Alejandro Romay y luego participó de varias telenovelas de canal 9, entre ellas "Ese hombre prohibido" y "Dos para una mentira". En ambas tiras, Graciela compartió elenco con Estell, con quien había iniciado una relación amorosa en 1985, tras conocerse trabajando juntos en "No es un juego vivir", otra telenovela.
En ese momento Cimer y Estell protagonizaron un romance muy popular en la época, que terminó abruptamente cuando el actor fue vinculado sentimentalmente a la actriz Mariquita Gallegos. Sin embargo, poco tiempo después, la pareja se revinculo y continuó adelante con la pareja.
El último papel en televisión de Cimer fue como parte de "Pasiones", telenovela de 1988 protagonzada por Raúl Taibo y Grecia Colmanares en los roles estelares. Unos meses antes Graciela ya había intentado quitarse la vida, ya que se había quedado sin trabajo, lo que atribuía a su participación en la campaña del expresidente Carlos Menem.
Estaba embarazada de su primer hijo con Estell, relación que ya era tormentosa e inestable, ya que al actor se le había endilgado un romance con Nancy Herrera, la ex pareja de Alberto Olmedo. En medio de una fuerte depresión, Cimer tomó somníferos pero fue encontrada a tiempo y se recuperó de la sobredosis.
Sin embargo, un año más tarde, el 2 de julio de 1989, sobrevino el suicidio de Graciela, que causó un fuerte impacto en el ambiente artístico y el público. La actriz no dejó ninguna nota. Sólo abrió la puerta de su dormitorio -ella, Estell y su hijo estaban viviendo en la casa de los padres de Cimer-, salió al balcón y saltó al vacío. Tenía solo 26 años.
La trágica vida de Estell
En el caso de Estell, nunca pudo recuperarse de la trágica muerte de Graciela y su carrera artística comenzó a apagarse. Además, fue denunciado por el padre de Cimer, según el cual la joven era "maltratada y golpeada".
En 1993, el Juzgado de Lomas de Zamora responsabilizaron al médico Arraya Hernández de prescribirle droga depresiva y a Marco Estell de habérsela suministrado. Desde ese momento su imagen se fue disipando del ambiente artístico y de la pantalla chica argentina, tal vez por su controvertida pelea con el mítico empresario Alejandro Romay, y con el autor y padre artístico Luis Gallo Paz, quienes lo catapultaron a la fama.
Luego, en 1992 Estell fue relacionado con otro caso policial, recordado como la masacre de General Villegas, en la que seis personas fueron asesinadas. El actor quedó vinculado por esta en pareja con la hija de una de las personas muertas. Las primeras sospechas cayeron sobre Estell y su novia, ya que se pensó que estaban atrás de la herencia de una casa, cosa que finalmente no sucedió. Pero para ese entonces, la carrera del actor ya estaba terminada.