Anamá Ferreira lleva Brasil en la sangre, pero se puede decir que es una argentina más. Triunfó como modelo, es una empresaria exitosa y hasta se tuvo que reinventar para poder atravesar esta etapa de pandemia con las escuelas de modelos que tiene en todo el país. Nacida en Campo Belo, Minas Gerais, llegó al país por primera vez en 1976 y se enamoró de estas tierras. La protagonista de #LaRecetaFamosa recibió a Para Ti en su departamento del barrio porteño de Recoleta y nos promete hacer sentir estos sabores cariocas con un strogonoff, uno de los platos más tradicionales del vecino país.
“Es ideal para hacerlo al mediodía, con un vinito blanco como me gusta a mi… y agasajar a tu pareja con una buena velita. Tu novio o novia no va a quedar con hambre. ¡Va a comer súper bien!”, promete. “Para mí, hacer un strogonoff, una feijoada, un tutú à mineira o una caipirinha es como tener un poquito de Brasil acá en argentina. El strogonoff lo como solo cuando yo lo hago porque (los de los restaurantes locales) no son ni parecido al mío. No me quiero agrandar, pero es bueno”, dice confiada.
Para ser certeros, esta preparación nació en 1890 cuando un chef que trabajaba para el conde Pável Aleksándrovich Stróganov, un reconocido militar ruso, la inventó en el marco de su participación en una competencia culinaria en San Petersburgo. Luego de la caída del imperio ruso, esta receta logró una alta adhesión alrededor del mundo y comenzó a servirse en los hoteles más top de China en la previa de la Segunda Guerra Mundial y ya para 1950 hizo su arribo a los Estados Unidos.
De esa forma, se fue expandiendo hasta Brasil en donde encontró una nueva versión en base a los gustos de sus habitantes: conocido como estrogonofe, el dato central es que lleva salta de tomate en lugar de crema ácida… aunque en estados como Río Grande Do Sul se mantiene tal cual se originó.
Ponerle sazón es la virtud de Anamá en la cocina
Si bien Anamá confiesa no ser una cocinera profesional, destaca que una virtud la hace pasar muy bien los requerimientos del mundo gourmet. “Aprendí porque veía cocinar a mi mamá y a mis amigas en Brasil. Se cocinar, pero no soy una cocinera del día a día porque no me da el tiempo”, arranca a contar.
"Mi hija (Taína Laurino Ferreira) cocina muy bien. Aprendió muchas cosas conmigo. Yo no soy cocinera, pero tengo mucha sazón para lo que hago… le cocine toda su vida y ahora ella lo hace muy bien”, sintetiza.
El mundo de las modelos y la comida, un gran debate
Siempre se dijo que el hecho de subirse a una pasarela implicaba el requisito implícito de cuidarse en absolutamente todos los alimentos que se ingieren, mirando al detalle las calorías de los productos y hasta restringiéndose algún que otro permitido.
Son muchas las mannequin que, años después de los tiempos de vertiginosos desfiles, hablaron de los trastornos alimenticios que sufrieron por estar inmersas en esa vorágine. Según cuenta Anamá, por ese entonces no sufrió este tipo de patologías que representan un severo daño a la salud.
La morocha, que llegó a trabajar en las campañas de Paco Rabanne y realizó producciones para las emblemáticas revistas Vogue y Cosmopolitan, es de la generación de figuras destacadas como Teté Coustarot, Patricia Miccio, Carmen Yazalde, Teresa Calandra y Adriana Costantini.
“Cuando yo trabaje de modelo, que hay muchas famosas de esa época, nosotras no nos preocupábamos mucho por la comida. No había una obsesión de ser esa modelo flaca. Viajábamos y comíamos muchísimo”, asegura.
Reinventarse en pandemia
Las restricciones por la cuarentena que provocó la pandemia de coronavirus la obligó a rebuscársela para mantener en pie las distintas sedes que “Anamá Models” tiene alrededor de todo el país.
En primer momento el cierre fue total y las deudas comenzaron a acumularse. La llegada de la posibilidad de trasladar el ámbito académico presencial a la virtualidad le dio un toque de esperanza de poder continuar con su proyecto. “Mi vida es una locura. Nos hemos reinventado. Trabajo con las escuelas por zoom y tengo algunas presenciales”, explica.
Su día: “Me levanto tempano y entreno todos los días porque es lo mejor para la cabeza. Camino doce kilómetros y acá estoy, viviendo y disfrutando con salud".
Ingredientes
Para el strogonoff
- 450gr de carne de res (paleta o lomo)
- 1 cebolla mediana
- 1 1/2 taza de champiñones
- 2 cucharadas de harina
- 2 cucharadas de pimentón
- 1 taza de caldo de carne
- 1/3 de taza de crema líquida
- 2 cucharadas de perejil picado
- Pimienta y sal a gusto
Para la guarnición
- 2 tazas de arroz
- 500gr de papas
Preparación
Paso 1: Colocar aceite y ajo triturado en una olla. Sumamos el arroz, echamos agua caliente y lo dejamos cocinar entre 15 y 20 minutos.
Paso 2: Cortar la carne en cubos (también se puede cortar en juliana) y llevarla a una sartén para dorarla con aceite durante 4 minutos.
Paso 3: Preparamos la salsa con una cocción suave de las cebollas picadas, los champiñones triturados, el pimentón, la harina, el caldo de carne, la crema líquida y salsa de tomate.
Paso 4: Incorporamos la carne a la salsa, esperamos a que se integre y ¡ya queda listo nuestro strogonoff!
Presentación: Lo ideal es usar un plato playo y colocar una buena porción de strogonoff con un timbal de arroz blanco y papas fritas como guarnición.
Cámara: Alejandro Carra y Guido Puterman.
Edición de video: Manuel Adaro.
