El célebre diseñador Karl Lagerfeld ha dicho en más de una oportunidad que “no es necesario que una modelo sea bonita, sino que debe poseer algo que la haga interesante y atractiva de mirar, para así hipnotizar a quien la vea”. Y no se equivoca: así lo han confirmado Sheila (14) y sus hermanas gemelas y albinas Lara y Mara (12), quienes ingresaron a la industria fashion por sus llamativos rasgos y el contraste que provoca la imagen de las tres juntas.
UNA HISTORIA SINGULAR. Sus padres son de Guinea-Bisáu, al oeste de África, y cuando su madre estaba embarazada de Sheila decidieron emigrar en busca de nuevas oportunidades y de un futuro mejor. Se instalaron en San Pablo y dos años más tarde llegaron las gemelas albinas Lara y Mara. Según varios periódicos brasileños, “al verlas por primera vez, su padre pensó que su mujer lo había engañado, así que se fue. Se separaron y la madre tuvo que hacerse cargo sola de las tres hijas”.
Actualmente, Felisberta Gomes (Bawar es el apellido artístico) vive junto a sus tres hijas en una favela en San Pablo. Es estilista especializada en peinados para personas de raza negra, en una peluquería en el centro de la ciudad. “El albinismo de Lara y Mara viene de familia, el tío de Felisberta también nació con el mismo disturbio –publicó el diario O Estado de S. Paulo–.
Para la Sociedad Brasileña de Dermatología, se estima que hay 10 mil albinos en el país: 1 cada 18 mil nacimientos. En África, continente de origen de las gemelas, la probabilidad es mayor: 1 por cada 8,5 mil bebés”.
FLORES RARAS. Los llamativos rasgos de Lara y Mara, sumados al contraste con su hermana mayor Sheila, no pasaron inadvertidos por la industria fashion. Así, el año pasado un productor las convocó para participar en un video sobre la historia de la raza negra para la marca Nike.
Más tarde, el fotógrafo suizo Vinicius Terranova fotografió a las gemelas y a su hermana para mostrar el encanto de la diversidad. Terranova fue el primero en retratarlas en un editorial titulado 'Flores raras', donde a través de una serie de imágenes se refleja la belleza entre los diferentes tonos de piel. “Mi arte representa la diversidad en lo bello y las extensiones literales y simbólicas del empoderamiento”, explicó el artista.
Enseguida el trío acaparó la mirada de todos y abrió su propia cuenta de Instagram (@lara_mara_sheila) que ya suma 125 mil followers y posee también una página web (www.bawar.com.br) cuyo objetivo es “difundir mensajes positivos e inspiradores a las generaciones futuras y a todos aquellos que de alguna forma se ven marginados por los estándares de belleza o por cualquier otra forma de discriminación o intolerancia dentro de nuestra sociedad”.
BELLEZAS DIFERENTES. En la industria de la moda cada vez hay más modelos poco convencionales, es decir que no responden a los cánones de belleza tradicional. Es conocido el caso de Aimee Mullins, una despampanante rubia nacida en 1976 en Estados Unidos. Es atleta, modelo y actriz, pero no tiene piernas. Le fueron amputadas cuando tenía un año porque nació con un mal llamado hemimelia fibular; sin embargo, su belleza ha sido destacada en el mundo.
La canadiense Winnie Harlow padece vitiligo (una enfermedad que le genera manchas por la ausencia de melanina) y estuvo presente en varios fashion weeks de Nueva York. En general al estrabismo se lo suele ver como un defecto, pero la modelo británica Moffy demostró lo contrario. A pesar de ser bizca, logró transformarse en un ícono del nuevo paradigma. También está Masha Tyelna –más conocida como “mujer pez”– quien se destaca por sus inmensos ojos azules y separados más de la cuenta. Y Molly Bair, cuyas orejas excesivamente grandes sumadas a sus ojos rasgados la llevaron a ser conocida como “la modelo alien”.
Ahora es el turno de las hermanas Bawar, cuyas caras e historia invadieron las redes sociales. Ellas –con el apoyo incondicional de su mamá– aprovechan este “minuto de fama” para comprometerse con todos aquellos que son albinos.
“EL ALBINISMO ES HERMOSO”. “Desde chicas soñamos con ser modelos y actrices –contó Sheila a la revista Para Ti–; Mara quiere viajar por diferentes países y a Lara le gustaría actuar en novelas”. Pero su vida no es nada fácil. “En la calle somos observadas de manera incómoda y en la escuela nos pasa lo mismo”, coinciden.
Debido al albinismo, Mara y Lara evitan estar demasiado expuestas al sol, usan protector solar y sus lentes se vuelven oscuros cuando hay mucha claridad para proteger la visión. “En el colegio oímos comentarios por usar gafas y tener el pelo largo, claro y trenzado” –cuentan–. Nosotras sentimos que el albinismo es hermoso, amamos nuestro pelo, el color de nuestros ojos y el tono de nuestra piel”.
Mara sostuvo: “Crecer así es increíble, nos encanta ser diferentes y estamos felices con nuestra belleza única”. Mientras que Sheila aseguró: “Vamos al mismo colegio, somos buenas alumnas y tenemos muchos amigos. Pero al igual que otros compañeros de clase que no son albinos, ni gemelos, negros o usan gafas, las tres hemos vivido experiencias de bullying. Creo que el bullying tiene que ver con las frustraciones de quien lo practica, no con las características de la víctima”.
Lara, Mara y Sheila ya posaron para editoriales y tapas de revistas como Marie Claire, Giz, Bazaar kids, entre otras; fueron elegidas por prestigiosas firmas como Nike, Insanis y Boutique de Krioula; y participaron del videoclip del cantante Thalles Cabral. Este año pasaron a ser representadas por una agencia de Múnich, Alemania, y están en contacto con otras agencias. Recientemente posaron para la renombrada firma A La Garçone, y fueron invitadas para el próximo desfile del diseñador Alexandre Herchcovitch. ¿Planes a futuro? En 2018 lanzarán su canal de YouTube y están realizando un documental.
TRANSFORMAR EL MUNDO. Gracias a la ayuda de su madre, las hermanas Bawar decidieron usar su tono de piel como reivindicación y la moda y las redes sociales como altavoz. En su Instagram y su web incluyen todas sus apariciones en los medios, y la respuesta del público es súper positiva. Su mensaje es el sentido común: “Queremos mostrar que somos como los demás. Podemos ser modelos, doctoras, bailarinas. Es un gen que nos hace como somos”, subrayaron.
Con los pies sobre la tierra, Sheila afirmó: “El dinero que ganamos lo ahorramos para nuestra futura educación. Pero la fama no significa necesariamente dinero, también es poder hablarles a muchos e intentar transformar el mundo”. En definitiva, ellas quieren demostrar que es posible triunfar hasta cuando las adversidades están a flor de piel.
Textos: VALERIA MARIÑO Fotos: INSTAGRAM Y WEB HERMANAS BAWAR