Otro año que se va, el balance sobre lo que fue y el planteo de las metas a alcanzar en 2022. En eso tenemos la cabeza a esta altura de diciembre. Pero a veces nos invade el sentimiento de frustración, ¿Cómo lograr, entonces, comenzar el 2022 de la mejor manera posible?
En primer lugar, es esencial ser objetivo. Los últimos dos años con la irrupción del COVID 19 fueron desafiantes para todos. Es muy difícil ponerse tareas a largo plazo por lo cual estamos aprendiendo a vivir mucho más el día a día. Esto significa saber entender que no todo lo que nos propongamos se va a poder concretar, pero sin frustrarnos en el camino.
Es intentar descubrir qué cosas nos hacen realmente bien para poder focalizarnos en ellas en este aventurado comienzo. Cada año es un nuevo libro en blanco para escribir. Está en nosotros encontrar con qué llenar las hojas de esta nueva aventura. Por eso, intentemos ponernos metas alcanzables.
Siempre todo inicio nos trae miedos, pero no permitamos que esto nos paralice. Si no te gustaron sucesos del 2021 no las repitas en el 2022. Escúchate y permitirte modificar lo que no te hizo bien.
En vez de concentrarnos en lo malo que tuvo el año que está terminando enfoquémonos en las nuevas oportunidades que tenemos para estar mejor. Los cambios no son fáciles, pero nos ayudan a alcanzar nuestras metas. Lo más cómodo sin lugar a duda es seguir con nuestras vidas sin modificar nada. Es vivir en piloto automático y no permitirnos pensar cómo podemos estar incrementar lo que nos gusta. Por eso, armá una especie de cita con vos misma para repensar que te potencia. Armá proyectos para los próximos meses y proponete concretarlos.
Escribí un listado con lo que te gustaría hacer sí o sí en los próximos tres meses. Si no sabés con quién compartirlas, no esperes a que alguien te quiera acompañar a concretarlos y salí a cumplir con tus deseos. Rodéate de gente que te sume y te potencie. Las buenas energías con contagiosas y si querés un cambio tenés que salir a buscarlo. Nada cae del cielo, todo requiere esfuerzo y dedicación. Cuanto más te esfuerces en algo, más chances vas a tener de que suceda.
Es importante entender que la vida es un proceso y que siempre podemos modificar lo que no nos gusta. No sufras por lo que aún no sucedió, pero intenta encontrar la manera de concretarlo en este nuevo año que comienza. Si nos mantenemos en movimiento buscando estar mejor solo vamos a atraer buenas energías para todo lo que emprendamos. El 2022 es un fresh start: ¡salgamos a disfrutarlo!
