Seas vegana o no, no hay nada mejor que una receta que podés resolver con ingredientes que ya tenés en tu heladera. Te contamos cómo hacer un riquísimo helado vegano con nada más banana y frutilla.
Qué vas a necesitar
Ingredientes:
- Dos bananas bien maduras
- Un puñado de frutillas
- Azúcar o endulzante opcional
Manos a la obra
Paso 1: Elegí dos bananas maduras. Tené en cuenta que si están poco maduras, vas a necesitar endulzar más la preparación.
Paso 2: Cortalas en rodajitas finitas. Es clave que no queden pedazos grandes, así es más fácil lograr que se congelen. Ahora, ¡Al freezer!
Paso 3: Lavá un puñado de frutillas y cortales el tallo y las hojas. Llevalas al freezer en pedacitos junto a las bananas.
Paso 4: Después de tres horas, llevá las frutas congeladas a la procesadora. Si bien podés utilizar licuadora, vas a necesitar agregar líquido y no va a tener la consistencia necesaria.
Paso 5: Procesá la banana junto a la frutilla por aproximadamente siete minutos. Confiá en el proceso: si bien parece que no se va a unir, la banana va a revelar una sorprendente textura cremosa. Este es el momento de agregar endulzante a gusto, ¡Pero no es necesario!
Paso 6: Vertí la preparación en un recipiente. Podés comerlo en el momento o volverlo a llevar al freezer para lograr una consistencia más dura. Agregale los toppings que más te guste, te recomendamos los frutos rojos.
Ahora, ¡A disfrutar!
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