Meghan Markle se despidió de los eventos de la Familia Real y lo hizo con todo. La duquesa de Sussex fue el centro de atención en su último acto oficial y su cuñada Kate Middleton estuvo allí para decirle adiós. Dos looks para la historia.
Las chicas sabían que todas las miradas estaban sobre ellas y, en la última reunión familiar en Londres, Meghan y Kate no desentonaron: se vistieron para la ocasión.
Las duquesas de Cambridge y de Sussex asistieron al servicio por el Día del Commonwealth en Westminster Abbey de la mano de sus maridos: los príncipes William y Harry de Inglaterra (o al menos Meghan lo hizo de la mano, Kate prefirió caminar resueltamente solita).
Oda al monocolor
Las cuñadas coincidieron en elegir un tono shocking y primario para contrarrestar el día gris londinese.
Kate eligió un vestido de Catherine Walker (un modelo vintage, que gusta usar) color tomate, un tapado con la cintura bien marcada -como le gusta- y elegantísimos stilettos Gianvito Rossi. Lo acompañó por un clutch. Todo al tono.
Algo similar hizo Meghan. La duquesa de Sussex supo elegir el atuendo de su despedida: apareció con un vestido de Emilia Wickstead, un atrevido look con capa en verde que cortó con stilettos nude Aquazzura.
No se sabe si hubo intercambio de chats para no pisarse en los colores o para ponerse de acuerdo en peinados y accesorios pero todo indica que no, ya que las cuñadas hace cuatro meses que no se hablan y en esta ocasión, ni siquiera se las vio intercambiar miradas.
Primer plano
Makeup al estilo real. Esta vez Meghan lució lo que mejor le queda, un estilo natural acentuado en sus ojos, con solo sombras y máscara.
¿Sus cejas? Peinadas de manera que luciera como quería lucir: determinada pero dulce a la vez. La duquesa de Sussex ocultó sus pecas con base, aplicó rubor y un sentador labial piel.
Por su parte, Kate coincidió: desfiló ante la multitud con un makeup suave; cejas bien peinadas, rubor y un tono de labial que destacaba lo más importante: su aplaudida y esperada sonrisa.
Los detalles, importan
Accesorios. Las duquesas lo saben, una ocasión como esta ameritaba fascinator, muy british style. Kate optó por un modelo de Sally Ann Provan (tuneado para la duquesa en especial).
Meghan en cambio eligió un atrevido William Chambers además de un bolsito de la uruguaya Gabriela Hearst, una de sus favoritas.
"El encuentro no me movió ni un pelo"
O algo similar. Es que a las duquesas se las vio muy seguras de sí mismas. Ambas eligieron recogidos (a las dos les queda muy bien). Meghan con rodete y Kate con unas torcidas -y el color, ¡perfectamente hecho!-.
El gran adiós
Impecables, cada una con su estilo. Así le dio Kate la despedida a Meghan de los encuentros oficiales de la Familia Real. Team, ¿rojo o verde?