En medio del proceso de divorcio con Liam Hemsworth, la rubia tuvo un fugaz y tormentoso romance con la bloguera Kaitlynn Carter que la dejó con el corazón roto. Lejos de las fiestas, prefiere encontrar su paz interior sobre el mat.
Perseguida por los paparazzi y con el corazón hecho trizas, Miley Cyrus se refugia en su sadhana (práctica espiritual diaria). Es que, si bien la ex Hannah Montana es famosa por sus alocadas fiestas y por haber confesado que usó varias drogas… últimamente se está mostrando su parte más zen e introspectiva en sus redes sociales. “La nueva luna me llevó directo al mat de yoga”, escribió la actriz ayer a punto de empezar su rutina. ¡Bien por Miley!
“La nueva luna me hizo sentir fresca y limpia! GRACIAS UNIVERSO. La experiencia humana puede ser genial… GUIANOS HACIA LA LUZ”, posteó este domingo en un insta story (@mileycyrus) en una seguidilla de catarsis dedicada a la energía de la luna nueva que entró en Libra, el signo de las relaciones. Sin dudas, el punto flojo de la exitosa artista.
Si bien su nuevo tema, Slide Away, está en el ranking de todas las radios del mundo… Su vida privada está atravesando uno de los peores momentos. Recordemos que la rubia y Liam Hemsworth están en pleno proceso de divorcio luego de solo ocho meses de casados (y nueve años juntos). Pero según cuentan sus allegados, la rubia estaría con el corazón roto por culpa de la bloguera Kaitlynn Carter, con quien habría tenido un romance fugaz de dos meses. Algunos hasta aseguran que ella habría sido la tercera en discordia entre los actores.
"Puedo admitir muchas cosas, pero me niego a admitir que mi matrimonio terminó por una infidelidad. Liam y yo hemos estado juntos por una década. Lo dije antes y sigue siendo cierto, amo a Liam y siempre lo haré", se defendió la cantante a través de Twitter. Sin dar más detalles sobre sus amores y rupturas, Miley prefiere mostrarse preocupada por recuperar su paz interior practicando yoga cada día. Namasté…