La firma italiana se instala en el universo lifestyle. Gucci, dejo de ser sinónimo solo de moda, hoy presenta un abánico interesante de vertientes con lenguaje propio. El director creativo- Alessandro Michele, es el gran responsable de esta revolución que vive la marca.
En 2011 el Museo Gucci abrió sus puertas en Florencia -precisamente en el antiguo Palazzo de la Mercanzia, que reúne piezas históricas y colecciones exclusivas.
Michele, reversionó el lugar convirtiéndolo en un espacio eclético donde convive el presente y pasado con una propuesta amplia en decoración, arte y moda.
Ahora, la última novedad es el sector gastronómico, nada más ni nada menos de la mano del multipremiado chef italiano Massimo Bottera, reconocido con tres estrellas Michelín, dueño del restaurante Osteria Francescana, el mejor del mundo en 2016, según The World's 50 Best Restaurants. De esta manera,'Osteria Gucci', desembarcó con sus sabores en el segundo piso.
La fusión del diseño y la alta cocina a esta presente en cada detalle desde la exquisita oferta de menú, pasando por la ambientación con reminiscencias oníricas inspiradas en la flora y la fauna, hasta la vajilla con la estampa característica impuesta por Michele.
El primer piso, a su vez, dispone de un multiespacio donde se exponen obras de arte, instalaciones, muestras intervenidas, se enriquece con una nueva línea de objetos eclécticos para el hogar.
Muebles, almohadones, velas, sillas y vajillas son algunos de los accesorios que componen la línea de Gucci Decor, inspirada en las colecciones. Según la marca, el objetivo no es imponer un estilo decorativo sino brindar la posibilidad idear una impronta propia.
"Decidimos convertir el espacio en un laboratorio que alberga todos los elementos necesarios para experimentar de forma creativa. En las salas De Rerum Natura, por ejemplo, vemos la pasión de Gucci por la flora y la fauna expresada a través de prendas vintage y actuales, estatuillas de animales de plata hechas por la firma en los años cincuenta y obras de arte originales de Vittorio Accornero, que fue el encargado de crear el estampado Flora de Gucci en 1966", detalló Maria Luisa Frisa, directora de Moda y Diseño de la Universidad de Venecia, colaboradora del proyecto.
Para los amantes de la moda, es posible adquirir modelos realizados exclusivamente para Gucci Garden que no se encuentran a la venta en las demás tiendas.
Esta alianza además presenta fines benéficos, la entrada tiene un valor de 8 euros y el 50% de la recaudación será donado a las obras de restauración de la magnifica Florencia.
Fotos: Gucci