Máxima Zorreguieta es una de las royals más aclamadas por su estilo: desde que se casó en 2002 con el entonces príncipe Guillermo Alejandro de Holanda con un vestido de Valentino que los especialistas en la materia aclaman sus elecciones fashionistas.
Parte de sus aciertos estilísticos tiene que ver con los complementos que elige como tocados, aros, zapatos y carteras, siendo fanática de estos últimos.
Entre los modelos icónicos de Gucci y Celine, hay un diseño atemporal y emblemático repetido en varios colores de una de la casas de moda más importantes del sector: se trata del 2.55 de Chanel.
Diseñado en 1955, consta de una pieza con doble cadena de metal de 20 centímetros de largo realizada en piel acolchada y forrada en color borgoña. Tiene tres bolsillos de fuelle, dos más anchos que los anteriores en el extremo y uno más pequeño en el interior diseñado exclusivamente para guardar, por ejemplo, el labial. Además de la clásica doble 'C' estampada en el forro. Con el tiempo esta pieza digna de un museo ha experimentado algunos cambios: el cierre inicial era un broche dorado de oro fino, pero Karl Lagerfeld lo cambió por un cierre joya con el logo de la casa.
Además de esta cartra insignia, Máxima atesora otros modelos de diferentes tamaños pero que siguen la misma estética elegante y atemporal.
Las carteras Chanel, las favoritas de Máxima Zorreguieta
En color beige
Es el segundo clásico por excelencia, después del negro. Este modelo que lleva con doble cadena suele combinarlo durante la época de primavera–verano con otros complementos de la misma tonalidad para así aportar luz y armonía al conjunto como hizo con este vestido y blazer de tweed de Oscar de la Renta.
En color azul jean
Un tono contemporáneo que se ha convertido en un must entre las que más saben de moda, que combina a la perfección con los estilismos más informales que luce entre evento y evento, incluso con los jeans acampanados y los taco aguja. Todo un acierto.
En color rojo
Al igual que al maquillarse los labios, este tono aporta luz al rostro: ni hablar en un look monocolor, como el que luce a continuación.
En color blanco
Días antes de las vacaciones de verano de 2015, la consorte de los Países Bajos apareció con un conjunto perfecto para los días de media estación: cárdigan largo y estampado, blusa satinada en color perla, pantalones y sandalias con plataforma de yute. El toque chic se lo dio con el modelo acolchado en tono blanco de la casa francesa.
En color gris
Es el tono intermedio que no debe faltar en un armario como el de una 'royal'. Entre su colección también destaca el diseño creado por Mademoiselle Coco en gris con el broche y la cadena plateada. Un complemento que hace match con zapatos y cinturones para crear una visión mucho más estética y acorde con la época, una fórmula de la que hace uso desde hace varios años.
En color metalizado
Durante su viaje en el mes de octubre 2016 a nuestro país lució un vestido midi de estampado animal de Givenchy a conjunto de un bolso vintage negro con detalles metalizados de Chanel con su mítica doble cadena que no le hemos vuelto a ver.
En bicolor
En ocasiones un total look bicolor puede ser un acierto seguro. Máxima afirmó esta regla durante su visita a La Haya con una sencilla camisa de seda cruda, pantalones negros y la joya de la corona: el bolso bicolor de Chanel. No es un 2.55, sino otro modelo más antiguo y alargado.
Tamaño XXL
El emblema de la casa francesa ha conquistado de tal forma a Máxima que incluso apuesta por el formato XXL para sus viajes, porque la comodidad también reina en su vida. En esta ocasión y bajo el paraguas transparente, la consorte holandesa luce el bolso en color blanco colgado a su hombro durante su estancia en Oslo en mayo de 2017.
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