Úrsula Corberó sabe como poner a todos a hablar de ella: y la gala de los Premios Feroz no fue la excepción. La ceremonia, que se presta como antesala a los Premios Goya, tuvo como una de las protagonistas a la intérprete que apostó por un look atrevido y original.
El Palacio Vistalegre de Madrid vio llegar a la protagonista de La Casa de Papel con un vestido largo con una textura que simula una red plateada y brillante por la firma Bottega Veneta. El vestido, cuya primera capa está compuesta por un set tipo bikini con el mismo material brilloso que su segunda capa: de hombros a suelo, una caída natural que pareciera tejida en crochet a mano.
Pero si hay algo que definitivamente no puede pasar desapercibido, es la presencia de unos enormes pompones mega XL que cubrían la prenda, formados por cientos de flecos para aportarle movimiento y originalidad a su silueta.
Para complementar un outfit que hablaba por si mismo, la novia del Chino Darín optó por acompañarlo con unas sencillas sandalias de taco nude de Gianvito Rossi y joyas por Cartier: una fina pulsera de diamantes y unos brillantes y pequeños aritos.
Con el peinado, Úrsula eligió un recogido con un rodete tipo bailarina, con un acabado relajado y poco preciso. Así, dejó lugar para apreciar la impactante espalda que nos regala esta pieza de Bottega Veneta.
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