La princesa Ana llegó a Uganda junto a su marido, Timothy Lawrence, con el objetivo de colaborar con varias organizaciones. Y mientras estaba allí, fue invitada por el presidente del país africano, Yoweri Museveni, a una cena en la que hablaron de la labor de la princesa en ese país y le deseo buena suerte para poder desarrollar las tareas que tenía en mente. Para la ocasión la hija de la reina Isabel II, eligió un vestido cruzado azul casi idéntico a uno que lució Kate Middleton. Algo que enseguida se volvió viral en las redes sociales.
La primera fashionista
De acuerdo a los expertos en realeza, la princesa Ana fue la primera royal fashionista. Ella se animó a usar minifaldas en la década del 60, también era habitual verla en pantalones y usaba looks imponentes con los que solía llamar mucho la atención, algo que obviamente molestaba a su madre. Hasta la prensa se cuestionó muchas veces si se vestía adecuadamente. Sin embargo, a ella nunca le importó y se mantuvo fuel a su estilo.
Un look inspirado en Kate Middleton
La princesa Ana, llegó a la cena en un vestido azul de escote cruzado en "v" y mangas acampanadas que combinó con zapatos negros. Lo asombroso de este clásico look, es que la prenda es muy similar al que lució Kate Middleton en 2010, un modelo de Issa London con el que anunció su compromiso con el príncipe William.
En honor a la Reina
Para combinar con el vestido azul, Ana eligió un broche de zafiro de la emperatriz María Feodorovna, que perteneció a su madre, la reina Isabel II. Una joya que la monarca de Inglaterra lució en varias ocasiones y que tiene más de un siglo y medio de antigüedad. Una manera de llevar a su madre recientemente fallecida más cerca.
Pequeños guiños con la ropa
No es la primera vez que la monarquía inglesa envía "mensajes" con las prendas que elige vestir. Es habitual que Kate Middleton homenajee a Lady Di con las prendas que lleva. Recientemente eligió un tapado rojo que se llamaba Spencer y que fue creado por una marca inglesa en honor al 25 aniversario de muerte de la princesa. Y lo mismo hizo con las joyas en el funeral de Isabel II. Por lo que lo que hizo Ana no sorprende, ya que es habitual en la monarquía inglesa.