La princesa Amalia continúa sumando experiencia como miembro oficial de la Corona de los Países Bajos y hoy hizo su debut en el Día del Príncipe, uno de los actos institucionales más importantes para la Familia Real neerlandesa en la que se da inicio al año parlamentario.
La joven, de 18 años, asistió acompañada de sus padres, los reyes Guillermo y Máxima, y de sus tíos, los príncipes Contantijn y Laurentin.
La Princesa de Orange asistió vestida de gala y en carroza de cristal, en la primera vez que se realiza este acto desde que fue suspendido por la pandemia.
Con el asesoramiento de su estilista, Rick Evers (quien también está detrás de los looks de Máxima) eligió un vestido de gasa en color verde botella de Asos con manga tipo murciélago, un tocado en color claro de Maison Fabienne Delvigne, la prestigiosa firma belga. Y, finalmente, una cartera de mano de predería Anna Cecere, que complementó con guantes y zapatos en color natural.
Las joyas históricas que lució Amalia en su debut en el Día del Príncipe
Como complemento para su look, la heredera al trono de Países Bajos llevó unas llamativas joyas: las esmeraldas de la reina Guillermina, que datan de 1899, y que fueron un regalo de la reina Emma a su hija. Integraban la dote de la princesa Guillermina de Prusia por su boda con el príncipe Guillermo en el siglo XVIII.
El collar, de diamantes y esmerladas, tiene en el centro una espectacular piedra preciosa cuadrada ribeteada de brillantes. Es muy habitual que la reina Máxima las lleve acompañada de la tiara de este fabuloso conjunto.
De los símbolos oficiales, la princesa Amalia llevó la cinta y la gran cruz de la Orden del León de los Pasíses Bajos.
Qué es el Día del Príncipe en los Países Bajos
Según la tradición, el tercer martes de septiembre, los Reyes, y en esta ocasión su hija mayor, viajan en el Carruaje de Cristal al Teatro Real. Allí, el Rey pronuncia el discurso al trono con el que el monarca da por inaugurado el año parlamentario y da a conocer el programa del Gobierno. Paralelamente se hacen públicos los presupuestos del Estado.
Esta jornada histórica se remonta a 1887 y hace referencia al cumpleaños del príncipe estatúder Guillermo V (1748-1806) y la vistosa procesión, que antes se hacía en la polémica carroza de oro, se viene desarrollando desde el año 1912. El día finaliza con la imagen desde el balcón, desde donde la Familia Real saluda al público congregado en los aledaños del Palacio de Noordeinde.