Balenciaga lo hizo de nuevo, otra colección, otro desfile con el que impacta. No estamos seguras de si para bien o para mal, pero impactante al fin. Los fanáticos de los diseños arquitectónicos y sofisticados de Cristobal Balenciaga suelen repetir "si se levantará de su tumba..." es que recordemos que se retiró del mundo del diseño porque se negaba a hacer prêt-á-porter, entonces ver hoy lo que está sucediendo con su marca, no lo pondría muy feliz que digamos.
Entre el barro
El desfile se llevó a cabo en el interior del Parc des Expositions y la obra de esta puesta en escena, estuvo a cargo del artista Santiago Sierra. Un espectáculo apocalíptico, oscuro y repleto de barro. Al show lo abrió el polémico Kanye West, íntimo amigo de Demna, con una chaqueta que más parecía un chaleco antibalas en un look total black. Las prendas se veían manchadas, con desgastes "artísticos".
Verano oscuro
Una colección en una paleta de colores entre el negro y el gris, con detalles en flúor, con prendas que iban desde pantalones cargo hasta vestidos de gala, que daban lástima verlos caminar sobre el barro. El athleisure se mantiene con buzos y monoprendas con capuchas. La silueta pasa desapercibida tanto en hombres como en mujeres con prendas oversize.
Accesorios raros
Bolsos con forma de osos de peluche, estolas con formas de serpiente, un sobre con forma de un paquete de papas fritas. Los accesorios fueron divertidos y lo que le aportó un poco de luz a una colección oscura que presentó el director creativo de Balenciaga.
Lo opuesto a Balenciaga
Demna Gvasalia está empeñado en escandalizar al publico con cada una de sus colecciones. Y lo logra redefiniendo el concepto de lujo. Lo increíble es que el diseñador georgiano ha convertido a la marca en un éxito en ventas. Y ahora apuesta por conquistar al mercado de segunda mano. Si lo ve Balencaiga probablemente se vuelva a morir, pero es innegable que lo que sea que esté haciendo Gvasalia está funcionando.
