La reina Máxima junto al rey Guillermo Alejandro recibieron en Países Bajos al emir de Qatar y a su esposa, la jequesa Jawaher bint Hamad bin Suhaim Al Thani.
En una ceremonia oficial celebrada en el palacio de Noordeinde, en La Haya, la royal eligió un elegante look en celeste, repitiendo un color que le vimos lucir en su reciente gira por Estados Unidos y que es tendencia en el verano europeo, que acaba de comenzar en el Hemisferio Norte.
En este oportunidad, la reina llevó un conjunto compuesto por una blusa con lazo en el cuello y mangas acampanadas en la zona de los puños, que acompañó con una falda de cintura alta y largo midi, de ruedo irregular, creada por la firma belga Natan.
La reina lucía tan sencilla como elegante y elevó el look con un impresionante collar con zafiros y diamantes, salpicados de piedra de luna, que combinó con aros trabajados en las mismas piedras.
No es la primera vez que vemos a Máxima con esta falda celeste: la había estrenado para un concierto navideño en diciembre del año pasado, donde el comentario del momento era que había inspirado su look en Cenicienta, y luego la repitió para otro, en el mes de abril.
En aquella oportunidad la usó con una remera amarilla de manga larga y escote redondo. Sin duda, dos formas muy distintas de lucir esta increíble falda, aunque las dos muy favorecedoras.
En cuanto a los complementos que eligió este lunes, Máxima usó zapatos tipo T color nude, de Jan Taminiau, una cartera de mano en gris oscuro y guantes de cuero.
En el mismo tono eligió el turbante que acompañó con el pelo suelto, trabajado en suaves ondas y con el flequillo cayendo de costado.
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