La casa real española sorprendió con una noticia: la princesa Leonor y la infanta Sofía tendrán su primer acto oficial solas, sin la compañía de sus padres, los reyes de España.
Según informaron, la agenda de las royals se llevará a cabo en la sierra madrileña y consistirá en plantar un árbol con motivo de la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente.
Si bien la actividad es muy sencilla, servirá para demostrar cómo han evolucionado las hijas de los reyes desde aquella lectura de fragmentos de El Quijote que hicieron por streaming el 23 de abril de 2020 y si están preparadas para representar a la monarquía española.
Hasta el momento esa lectura de fragmentos de El Quijote organizada por el Círculo de Bellas Artes madrileño con motivo del Día del Libro había sido la única vez que la princesa y la infanta representaron a la Casa Real española. Y lo hicieron sin despeinarse y sentadas en el salón del palacio de la Zarzuela. Pero ha sido precisamente ahora, a las puertas de que Leonor abandone España para estudiar en el extranjero, cuando se ha decidido que las hermanas están preparadas para enfrentarse a los actos públicos en solitario y como únicas representantes de la monarquía española.
Leonor ha demostrado con creces que está preparada para ello. Con 12 años ya leyó un artículo de la Constitución bajo la atenta mirada de toda su familia en el Instituto Cervantes, en 2019 arrancó lágrimas de emoción a su abuela Paloma Rocasolano con su discurso bilingüe en la ceremonia de los Premios Princesa de Asturias y el año pasado participó por sorpresa junto a su padre en un acto de la Fundación Princesa de Girona hablando en un correctísimo catalán.
Además, el 24 de marzo de este año volvió de nuevo al Instituto Cervantes para afrontar su primer acto público representando ella misma a toda su familia, en el 30 aniversario de esa institución. La princesa habló, sonrió, representó y como dato curioso en la ceremonia cedió al Instituto Cervantes el ejemplar de la Constitución y del Quijote que usó en sus anteriores actos oficiales.
En contraste, la infanta Sofía mantiene una actividad muy escasa. A pesar de ser la segunda en la línea sucesoria del trono español, nunca ha ido a un acto público sin al menos su hermana como compañía y hasta que no leyó el Quijote no se conocía su voz.