Mica Viciconte compartió con sus seguidores de Instagram una foto de su desayuno proteico de este sábado.
La pareja de Fabián Cubero es deportista -va al gimnasio todos los días donde sigue una exigente rutina junto a su preparador físico y también suele jugar al pádel casi todas las semanas-, es mamá de un bebé de un año y medio y se levanta todos los días muy temprano para ir a su trabajo en Telefe.
Así las cosas, la ex Combate lleva adelante una alimentación muy sana, plena de frutas y verduras, y suele dedicar un tiempo a la preparación de sus desayunos proteicos, ideales para tener mucha energía durante todo el día.
Por otra parte, la pareja de Cubero acaba de retomar su rutina tras el festejo de quince de Indiana, la mayor de las tres hijas del ex fubtolista, que celebró el fin de semana pasado con un cumpleaños campestre.
Qué incluyó Mica Viciconte en su primera comida del día de este sábado
En su desayuno de este sábado, la panelista de "Ariel en su salsa", que además es guardavidas, incluyó un jugo de apio, perejil y limón recién exprimido y preparado con una juguera.
Y completó con una tostada de pan de campo con queso, rodajas de palta y huevo cocido sin aceite. "Desayuno de hoy!", escribió la mamá de Luca Cubero en su foto que publicó en sus Historias de Instagram.
"Y a alguien también le gustó el jugo", escribió en la foto compartida inmediatamente después, donde se ve cómo su bebé prueba la preparación de apio, perejil y limón mientras Fabián, su papá, lo sostiene en brazos.
El nuevo problema que enfrentan Mica Viciconte y Fabián Cubero y que los obligaría a mudarse
Mica Viciconte y Fabián Cubero estarían enfrentándose con un nuevo problema, esta vez relacionado con su casa de un country de Escobar, donde viven desde hace un tiempo.
Según contó Laura Ufbal en su portal de noticias, la pareja -que convive con sus hijos Luca e Indiana-, estarían indignados por el aumento del alquiler y negociando para quedarse uno o dos meses más antes de poder mudarse a la casa que están construyendo en Nordelta.
El problema reside, siempre según la fuente, en que la propiedad nueva que está en obra aún no está en condiciones de ser habitada y, en caso de mudarse dentro de uno o dos meses, los Cubero van a tener que vivir por ejemplo, sin muebles bajomesada o alacenas en la cocina.
Y aunque la familia intente apurar a la empresa constructora, lo cierto es que por la situación económica reinante y la especulación propia de ciertos sectores comerciales, hay elementos que no se están consiguiendo. Por lo tanto, la construcción marcha a paso lento. Veremos qué pasa.
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